Luis Suárez es conocido, aparte de por ser un grandísimo goleador, por no ser un tipo especialmente limpio sobre el terreno de juego. Su agresividad, coronada durante el Mundial de Brasil tras morder a un rival, le ha dado algún quebradero de cabeza a los rivales que la han sufrido.
El último ejemplo ha sido el futbolista del Valencia Aymen Abdennour, que ni corto ni perezoso, tras sufrir toda clase de marrullerías del charrúa, ha aireado en las redes sociales las ‘marcas de la batalla’ tras el partido en Mestalla del sábado 5 de diciembre de 2015.