El nuevo Santiago Bernabéu, esto es, la reforma del estadio del Real Madrid, no será realidad tal y como lo soñó Florentino Pérez, presidente del equipo merengue. El proyecto que se anunció en 2012, ése que presentaba un moderno recinto techado con un centro comercial y un hotel de lujo fusionados al feudo blanco, con una piel metálica cubriendo su superficie es ya simplemente imposible.
El Ayuntamiento de Madrid que dirige Manuela Carmena negocia, a través del delegado de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Calvo, con los responsables de la entidad para poder acometer una mejoría en las instalaciones acorde a la ley, después de los últimos reveses sufridos por el club y su deseo de un lujosísimo Bernabéu.
Entre las reformas que se están estudiando, apenas una se podrá llevar a cabo con respecto a aquellas planteadas en su día: el techado del estadio. Dicho en otras palabras: no habrá ni hotel, ni centro comercial, ni aumento del aforo, ni piel metálica, ni aumento del parking subterráneo… nada de eso es posible.
Es más, según informa hoy El Mundo, incluso el techado del coliseo madridista podría verse sometido a ciertos problemas, toda vez que el Ayuntamiento no pone inconvenientes a que se ejecute, pero sí a que se aumente la altura del estadio para colocarle esta estructura.
Según el proyecto anterior, el Bernabéu debería crecer también a lo ‘alto’ para tener techo, algo que, además, permitiría aumentar la capacidad del estadio en 5.000 localidades, pasando de las 84.000 actuales a unas 89.000.
Sin centro comercial, sin hotel, sin parking…
Las negociaciones, informa este rotativo, entre ambas partes se desarrollan dentro de un ámbito de excelente cordialidad en el que una norma rige todas las negociaciones. El Ayuntamiento no permitirá que haya modificaciones en la superficie que ahora ocupa el recinto.
Hay que recordar que el proyecto de reforma anterior ocupaba parte del paseo de la Castellana (justo el aparcamiento de superficie que se encuentra delante de esa fachada) y hacía que el Bernabéu pasara de 6.658 metros cuadrados a 12.250.
Una vez la justicia ha tirado atrás esa posibilidad, el Ayuntamiento dirigido por Ahora Madrid se ha mostrado inflexible. Lo que haya que hacer se hará, pero sin ganarle terreno a la parcela que ya ocupa el Bernabéu.
Esto, evidentemente, no impide que el Bernabéu pueda llevar a cabo algunas reformas. La principal, la del techo. Pero poco más. Ni siquiera el proyecto de aumento de la capacidad del parking subterráneo del estadio, de apenas 650 plazas.
El proceso va para largo. Una vez se sepa qué se puede hacer, el Real Madrid sacará un concurso para que se presenten proyectos de mejora dentro de esos parámetros.
Después, escogidos los finalistas, la asamblea de socios deberá elegir al ganador. Cuando éste se anuncie, empezará la cuenta atrás pare el inicio de las obras. Así pues, no es descartable que ese ‘nuevo’ Bernabéu no sea una realidad hasta principios de la nueva década.
