Mediapro se ha impuesto a Movistar y se ha adjudicado la subasta por los derechos de la Champions League del próximo trienio 2018-2021.
La empresa dirigida por Jaume Roures y Tatxo Benet , aliada a beIN Sports, filial de Al-Jazeera, ha ofrecido más de 1.000 millones de euros, lo que supone una subida del 30% respecto a la puja anterior, que englobaba las dos últimas temporadas y la próxima.
Y es que en esta ocasión, como cuentan Antonio Lorenzo y Javier Romera este 22 de junio de 2017 en ‘El Economista’, la exitosa trayectoria de los clubes españoles, con seis finalistas en las cuatro últimas ediciones, ha animado a los gigantes de la televisión a realizar un esfuerzo extraordinario.
De esa forma, el organismo futbolístico concedió un nuevo plazo -que expiró a media tarde del pasado miércoles- para recibir ofertas mejoradas que alcanzaran sus expectativas económicas.
Cada operador ha jugado sus bazas con la única referencia de las ofertas realizadas en otros países.
En el Reino Unido se impuso BT Sport con 455 millones de euros al año, lo que suma 1.365 millones de euros en el conjunto de los tres años. En Francia descorchó el champán SFR tras invertir más de mil millones de euros, a razón de 350 millones de euros al año, una cifra muy similar a la que se ha pagado en España.
En el caso de que hubiera ganado Movistar, la compañía habría estado obligada a compartir los contenidos con sus principales rivales (Orange y Vodafone) a través de una oferta mayorista, igual que ha sucedido durante la pasada temporada en el Campeonato Nacional de Liga.
Ni Mediapro ni Movistar han hecho declaraciones a la espera de que la UEFA reciba los avales y haga público el ganador.
