El primer fichaje del Real Madrid el próximo verano seguramente no sea Neymar. Tampoco Salah, quien, por cierto, ha dado un portazo a los blancos al afirmar que quiere seguir en el Liverpool.
¿Será Jan Oblak, portero del Atlético de Madrid? No parece, aunque todo apunte que el primer refuerzo merengue también ocupe un puesto en la portería. Alisson Becker, arquero de la Roma, es el que más papeletas tiene para convertirse en ese primer refuerzo blanco.
Cuenta Radio Montecarlo (RMC) que el Real Madrid ya ha empezado a preparar lo que será una oferta inminente. Tan inminente que el deseo del club que dirige Florentino Pérez es llegar a un pacto con la Roma previo al Mundial de Rusia en el que él, Alisson, será el arquero titular de Brasil.
No sería descabellado que los cariocas llegaran lejos en el torneo. Eso revalorizaría el valor del guardameta, así que por la capital no quieren sustos. Mejor atarlo antes.
En el Bernabéu ya saben que Alisson Becker costará cerca de 60 millones de euros, una cantidad elevada pero que de los candidatos que manejaba el Real Madrid para la portería era la que presentaba una mejor relación calidad – precio.