El primero, un viejo conocido: Gerard Piqué. No lo decimos por el hecho de que juegue en el FC Barcelona, lo decimos por el absurdo penalti que cometió y que permitió que Rusia empatase. El penalti del catalán, con las manos en alto, permitió que los anfitriones jugasen su partido e hiciesen llegar esa eliminatoria a la tanda de penaltis. Desde esa jugada, España naufragó, según defensacentral.
El segundo, por todos también conocido, Luis Rubiales. El ‘personaje’ que se encargó de echar a Julen Lopetegui a un día de debutar en el Mundial. El hombre más odiado por todos los españoles que querían el bien para la selección. El presidente de la RFEF debería de ser destituido inmediatamente ya que es totalmente incomprensible que echase a un profesional como la copa de un pino, por el simple hecho de querer fichar por el Real Madrid cuando terminase la cita internacional.
España, con Julen, fue como un tiro y llegó a conseguir una fase de clasificación totalmente inmaculada, con un récord de invicto, y con un fútbol que entusiasmó a muchos. Hoy, Piqué y Rubiales se han cargado esa ilusión y se han convertido en los dos encargados de dinamitar la esperanza española en bordar la segunda estrella en la camiseta. España se va para casa a las primeras de cambio…
VÍDEO DESTACADO: Así ha despachado Rubiales a Lopetegui y deja a España huérfana a dos días del debut
