Jorge Javier Vázquez, Belén Esteban, Kiko Hernandez o Karmele Marchante, está claro que en Sálvame el atractivo brilla por su ausencia. Para remediarlo, la productora La fábrica de la tele fichó, la temporada pasada, a Adriana Abenia.
La reportera es innegablemente guapa, el programa de Telecinco lo sabe y lo explota. Es sospechosa la cantidad de veces que Albenia pierde el equilibro en directo y enseña, por «casualidad», más de lo que debiera – A Adriana Albenia se le cae el vestido en «Sálvame»-.Y este verano hemos podido ver a la reportera en todo su esplendor.
Un buen ejemplo de ello es lo que sucedió el pasado viernes día 27. Paz Padilla dio paso a una Adriana relajada y feliz en las playas de Marbella. Animada por la presentadora, Abenia dejó la comodísima tumbona donde degustaba un mojito y se fue a dar una ducha con la ropa puesta, es decir, un bikini. Escoltada en todo momento por un fiestero local, la chica se puso a bailar bajo el chorro, con tan mala fortuna que tropezó y sufrió una aparatosa caída. Unos maromos llevaron de vuelta a Adriana, conmocionada, magullada y con medio pecho fuera, de nuevo al diván.
Siete días antes, el 20 de agosto, Sálvame mostró el making off de un reportaje fotográfico de Adriana para la revista masculina FHM. Ataviada unicamente con un conjunto de ropa interior negro, la reportera demostró ser lo único interesante del programa en el que trabaja.
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Adriana Abenia se tropieza en una ducha de Marbella
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Making off de la sesión de fotos de Adriana Abenia para «FHM»
