La temporada 2010- 2011 ha parido una buena cantidad de series españolas. Si hacemos balance, pocas han sido las que han aguantado el tipo. Lo cierto es que ha habido grandes y arriesgadas apuestas. Ficciones que han dado un paso más allá en lo visto hasta ahora. Pero muchas, a pesar de un arranque envidiable, han decepcionado hasta convertirse en auténticos ‘pestiños’. ¿Por qué?
Aunque siempre estamos comparándonos con el mercado estadounidense, lo cierto es que en el último año hemos sido testigos de un riesgo y una calidad artística poco vistos en España. Para empezar, Antena3 ha dejado de acomplejarse y de compararse con T5 y ha optado por la ficción como principal arma de reclamo. No todo les ha salido bien, pero la apuesta es loable.
Por otro lado, aunque ha habido muy buenas ideas y magníficos arranques, hay que decir que, en algunos casos, el desarrollo no ha sido fructífero. Las causas: desde los deseos caprichosos de las cadenas hasta el agotamiento natural de las tramas.
¿Cuáles son las series más decepcionantes de la temporada?
’14 de abril. La República’: Esto no es ‘La señora’
Cadena: TVE.
Buen comienzo: Bajo el influjo de ‘La señora’ (uno de los mayores éxitos de TVE), la pública quiso aprovechar su estela y encargó un spin-off, recuperando personajes y llevándoles al Madrid de la Segunda República. El primer episodio fue un impresionante despliegue de medios y de contención narrativa. Había buenos protagonistas y planteamientos clásicos pero efectivos.
El devenir: Demasiados personajes. A lo largo de la primera temporada, el espectador no se ha podido agarrar a una trama principal propiamente dicha. Todo se ha difuminado y su ritmo pausado llega a ser un lastre. Muchos han querido ver en ella un panfleto político del PSOE. Puede ser, pero es ficción. No hay que tomárselo a la tremenda. Habrá segunda temporada, veremos a ver si mejoran.
‘El barco’: El fin del mundo ya no es lo que era
Cadena: Antena3.
Buen comienzo: El primer capítulo de ‘El barco’ es una gozada. De acuerdo que es una especie de ‘El Internado’ en alta mar (ambas fueron creadas por la misma empresa Globomedia), o que el planteamiento -la humanidad es destruida y los únicos superviviente son los estudiantes de un buque escuela- era demasiado estridente. Pero la verdad es que estaba bien hecho. No aburría, tenía magia, romanticismo de todo a cien pero emocionante y unos personajes carismáticos.
El devenir: La serie es un éxito gracias a que es muy fácil de ver, pero se agota al tercer capítulo. La trama está demasiado encorsetada por la idea original. A grandes rasgos, la historia no avanza mucho y da la sensación de que visto un capítulo, vistos todos. Porque vamos a ver, ¿uno no se cansa ya de contemplar a Mario Casas sin camiseta y poniendo miradas de ‘tío interesante y misterioso’? Para ser justos, es cierto que hay un par de giros argumentales que funcionan (relacionado con el pasado de alguno de los protagonistas) y que la segunda temporada (con la aparición de Belén Rueda) promete. El problema es que no han sabido explotar, de momento, el conflicto que supone estar sólo en el mundo (que vean la magnífica ‘Battlestar Galactica’).
‘Los quien’: La cara oculta de ‘Cuéntame’
Cadena: Antena3.
Buen comienzo: Grandes actores (María Pujalte y Javier Cámara) y un punto de partida curioso (la historia del primer matrimonio divorciado en España en el año 81) hacían de ‘Los quien’ una apuesta prometedora para que Antena3 le arrebatase el reinado de series de humor a T5 (‘Aída’, ‘La que se avecina’) después de que desapareciera ‘Aquí no hay quien viva’. El primer capítulo es algo tímido aunque refrescante.
El devenir: La audiencia no le ha hecho mucho caso, pero ya se ha confirmado una segunda tanda de capítulos. El problema es que el humor es casi inocente cuando se esperaba algo más gamberro y crítico y algunos actores parece que han puesto el piloto automático. Lo cierto es que ‘Los quien’ no está mal pero no aporta demasiado, tan sólo ver un tiempo pasado con un poco más de ironía que los de ‘Cuéntame cómo pasó’ (TVE).
‘Ángel o demonio’: ‘Al salir de clase’+ ‘La profecía’
Cadena: Telecinco.
Buen comienzo: Qué grande es el primer capítulo de esta serie. Una joven, Valeria, descubre que es un ángel después de haberse cargado a sus padres y ha de enfrentarse a un grupo de malvados demonios cuyo trabajo es el de corromper a la gente. El producto fue creado para Cuatro pero, tras la fusión, Telecinco quiso darle más notoriedad. No era para menos. No habíamos visto nada igual antes. Era una idea fresca, arriesgada que combinaba el ‘mal rollo’ con un humor macabro e insolente.
El devenir: Es la gran decepción de la temporada. Primero, la protagonista no cae bien. Es una niña tonta e intensa más pendiente en ligarse al tío bueno que en salvar vidas. Casi nunca gana a sus rivales y carece de un grupo de aliados con los que te puedas identificar. Segundo, el montaje es soso y lento. Las escenas de acción no están bien rodadas, son demasiado breves y lentas. Tres: Telecinco quiso, para la segunda y última temporada, centrarse en el lado oscuro y olvidarse del humor negro que aportaban los malos de la función (cuatro diablos deliciosos y sublimes). Y cuatro: En realidad, no pasa nada. La historia no avanza y se repite siempre el mismo esquema.
‘Piratas’: Un palo más para Pilar Rubio
Cadena: Telecinco.
Buen comienzo: Aunque fue criticado, el primer capítulo de ‘Piratas’ estaba bien. El guión era ambicioso, con estructura cinematográfica. Los personajes accesibles y definidos y aunque pareciese una atracción de ‘Port Aventura’ llena de disfraces y sobreactuación, el resultado era digerible. Era una apuesta arriesgada, cara y curiosa.
El devenir: Es que, en realidad, es un producto bastante mediocre. Si no hay presupuesto para hacer algo así, que no se haga. Pero quedarse a medias es una pena. Aunque la trama no se ha agotado, la falta de calidad artística se hace notar. Excepto, Silvia Abascal, el resto está de baja forma. Meter con calzador a Pilar Rubio ha sido una mala idea, aunque, para ser sinceros, había demasiado empeño por parte de la crítica y de sus propios compañeros por machacarla. ¿Por qué todo el mundo la pone a parir y nadie se fija en lo mal que está Óscar Jaenada, actor, por cierto, que tiene un Goya?