Yurena, la cantante antes conocida como Tamara, está pasando por el peor momento de su vida y acudió a ‘Sálvame’ para contarlo. Su madre y compañera inseparable está gravemente enferma y su hija se teme lo peor. El momento pone los pelos de punta.
Yurena- antes, Ámbar y mucho antes, Tamara- la conocida cantante del ‘No cambié’, lleva tiempo intentando remontar su carrera musical. Pero sus deseos se han visto truncados por su peor pesadilla. Su madre está enferma.
Tengo miedo. Sé que es ley de vida, pero tengo miedo y no estoy preparada para lo peor. Aunque está como está, no quiero pensar en el desenlace y quiero imaginar que va a vivir mucho más años.
Confesó Yurena el 5 de marzo de 2013 en ‘Sálvame’. La cantante parecía desesperada, negándose a sí misma que su progenitora ya no es la que era.
Tanto a Yurena como a Margarita Seisdedos, las conocimos prácticamente a la vez. Fue hace más de diez años, en el desaparecido ‘Crónicas Marcianas’ (T5), cuando, la antes conocida como Tamara, dijo ser amante del ‘vidente’ Paco Porras.
Durante una década llena de éxitos y de fracasos, hemos visto Margarita defendiendo incondicionalmente a su hija, llegando incluso a agredir físicamente a todo aquel que se atreviera a meterse con la cantante.
No tengo palabras para decirle todo lo que ha hecho siempre por mí. Yo he sido su prioridad absoluta y eso no tiene precio
Reconoció Yurena entre lágrimas en ‘Sálvame’. Y es que, según narró la artista, su progenitora de 86 años, sufre Parkinson en estado muy avanzado, demencia y falta de riego:
Ha estado ingresada una semana y media porque estaba muy mal, no podía andar. Además, lleva deprimida bastante tiempo por el trato que se me ha dado por estos años. El parkinson ha ido avanzando a pasos agigantados. Los médicos me han dicho que a mejor no va a ir. La han empezado a tratar. No me saben decir cuánto puede durar.
Sí me reconoce, aunque en momento puntuales. Ha dejado de reconocernos tanto a mí como a mi padre. Pero ahora me quiere todavía más y quiero decirlo todas las veces posibles que la quiero con locura. (…) Si un día pierde la memoria del todo, quiero decirle las máximas veces posibles que la quiero con locura. No pensaba que fuese un deterioro tan rápido como el que ha sido. Vivo pendiente de ella y duermo muy poco pero no me siento sola. Tengo mis amigos y a mi padre, que está siempre en casa y está ayudando muchísimo.
