Si por algo ha destacado Kiko Hernández durante toda su carrera televisiva, ha sido por su hermetismo en cuanto a su vida íntima se refiere. Él es el único colaborador de ‘Sálvame’ que no ha entrado en el juego de vender su privacidad.
El 5 de mayo de 2015 se rompió (un poco) esta norma. El tertuliano se sometió a un ‘polideluxe’ express, en el que contestó a tres preguntas, dos de ellas relacionadas con la que fue su amiga, Lydia Lozano. La pregunta es: ¿por qué no se ha sometido a la máquina de la verdad en el ‘Deluxe’, donde, seguro, habría cobrado mucho más?
La respuesta a esta última pregunta es simple. Un polígrafo en el ‘Deluxe’ supone mojarse mucho más que al contestar tres preguntas en ‘Sálvame diario’.
El 5 de mayo de 2015, Kiko Hernández quiso someterse a la máquina de Conchita a ‘su’ manera, es decir, controlando la situación y contestando cosas que sabía que no sólo no le iban a dejar en mal lugar, sino que podrían dar juego durante varios programas.
Y si Hernández ha decidido pasar por el polígrafo ahora y no antes es porque en días anteriores había aparecido Angy, una mujer que aseguró que se besaron en una discoteca cuando eran compañeros de trabajo en el programa de María Teresa Campos, algo que Kiko ha desmentido una y otra vez.
Hernández no permite que nadie se meta en su vida privada-sentimental (si es que la tiene), por eso se ha sometido a la máquina de la verdad pero sin ‘someterse’ realmente-. Así mata dos pájaros de un tiro: calla a la tal Angy y a todos los que le acusan de ser un privilegiado en ‘Sálvame’-.
Pero antes de que Kiko contestase con un «no» a la pregunta de si había besado a Angy (el polígrafo, obviamente, le dio la razón a él), el colaborador se enfrentó a tres preguntas sobre Lydia Lozano, su compañero y antigua amiga.
KIKO NO QUIERE A LYDIA LOZANO
La primera de las preguntas fue la más directa y clara: «¿Quieres a Lydia Lozano?». De la misma manera que se la formularon, el colaborador contestó con un rotundo «No».
Tras estas palabras Lydia no supo lo que iba a decir el ‘polideluxe’, pero es cierto que siempre había tenido la esperanza de que la máquina dijera que estaba mintiendo. Sin embargo, el resultado fue todo lo contrario, ya que lo que dictaminó la máquina fue que decía la verdad.
Tras el ‘shock’ inicial, Lydia se hizo la digna y dijo:
Me ha venido muy bien porque siempre pensé que en el fondo había algo de buen rollito conmigo. Esto me ha venido muy bien, porque antes no me lo creía.
Sin embargo, ahí no quedó la cosa, dos preguntas más le tenían preparadas a Lydia y con contestaciones que tampoco le iban a gustar mucho a la colaboradora. ¿Has dejado de sentir afecto por Lydia? y ¿Mientes cuando dices que no sientes nada por Lydia? Kiko contestó que «sí» a la primera y que «no» a la segunda y, por supuesto, la poligrafista le dio la razón.