El caso de Raquel Bollo es curioso. Mucho. Es el ejemplo perfecto de los peligros de ser amigo de un famoso. Y es que, si tu única pancarta es la amistad con alguien más popular que tú, cuando esa relación se rompe, podríamos decir que sirves para poco. La colaboradora de ‘Sálvame’ siempre se ha vendido como la ‘comadre’ de Isabel Pantoja pero ahora, la tonadillera le ha dado de lado. ¿Qué será de Raquel Bollo? ¿Se renovará o la irán desplazando dentro del ‘cortijo’?
TRAS ‘SÁLVAME’ ¿QUÉ COLABORADORES SEGUIRÁN TRABAJANDO?
Si mañana terminase ‘Sálvame’ ¿Qué colaboradores podrían continuar trabajando y cuáles no? Hay que tener en cuenta que espacios del corazón ya quedan pocos y que trabajar en el programa de T5 da fama pero no prestigio, por lo que, salir de ahí es complicado. No dudo que personajes como María Patiño, Gustavo González, Gemma López, Chelo García Cortés (porque trabaja en ‘¡Hola!), Terelu (porque es hija de quien es) o incluso Mila Ximénez podrás seguir ejerciendo de periodistas.
También es previsible que, tras ‘Sálvame’, Kiko Matamoros, seguramente, se centraría más en su labor como mánager y sus ‘negocios’. Kiko hernández podría seguir escribiendo en ‘Qué me dices!’ o en la web de Telecinco. Y Belén Esteban, lógicamente, seguiría siendo la ‘princesa del pueblo’ y volvería a vender su vida para la prensa rosa.
Pero el caso de Raquel Bollo es distinto. Se supone que ella está en ‘Sálvame’ porque es un componente importante dentro del clan Pantoja pero, para ser sinceros, cada vez que se toca un tema importante de la tonadillera o su familia, Bollo siempre se limpia las manos o se escaquea. Es decir, que desde hace tiempo, es un personaje prescindible.
También es cierto que Raquel Bollo ha dado grandes momentos en T5. Se vende como una mujer con ‘carácter’, lo que en televisión quiere decir que grita mucho o que da mucho juego. Se ha enfrentado a casi todos sus compañeros pero, sinceramente, ‘polemistas’ hay a patadas. Hay que ser muy muy irreverente para vivir sólo de la confrontación.
EL MAL MOMENTO DE RAQUEL BOLLO
El caso es que, en los últimos años, Raquel Bollo se había proclamado única tesorera de los secretos de Cantora. Una a una, las amistades de Isabel Pantoja han ido ‘desapareciendo’ (es el caso de Chelo García Cortés, por ejemplo) y Bollo se ha quedado como la amiga fiel y única de la tonadillera. Hasta ahora.
El conflicto comenzó hace meses, cuando la hija de la Pantoja, Chabelita, colgó una foto en las redes sociales, junto a Luis Amaya, ex amante y enemigo íntimo de Raquel Bollo. Fue entonces cuando la colaboradora se enfadó y cargó contra la Chabelita, calificando su actitud como malvada.
Desde entonces, la hija de la tonadillera no se habla con Bollo y Pantoja desde la cárcel tampoco quiere saber nada de la que era su amiga.
El que sacó todo este embrollo a la luz fue, curiosamente, Jorge Javier Vázquez, quien, el 12 de noviembre de 2015, dijo:
Dentro de la cárcel Isabel Pantoja ya no habla bien de Raquel Bollo.
En aquella ocasión, Bollo guardó silencio pero cinco días después, el 17 de noviembre de 2015, tuvo que enfrentar la dura realidad: Ya no es bienvenida en Cantora. Su futuro como personaje público peligra. Drama.
Ese día, Vázquez le dijo a su colaboradora:
El titular es que eres consciente de que Isabel Pantoja no está hablando bien de ti. Y no sólo eso, tú te has quejado de que Isabel en prisión tiene la lengua muy larga, te has quejado con rabia incluso.
Raquel Bollo no lo negó:
Cuando me llegan ciertas cosas, en un momento dado me puedo quejar de que ella diga ese tipo de cosas.
Lo voy a dejar aquí porque esto no trae nada bueno
Eso sí, la colaboradora quiso añadir un poco de esperanza a su complicada situación:
A mí me hacen llegar un mensaje de Isabel, ella pide que se me transmita que no ha hablado mal de mí y yo tengo que esperar a que salga y me lo diga.
Por los años de amistad, por lo que la quiero y lo que me ha demostrado es que me quiere, en el caso de que esto fuese así, las cosas entre amigas se pueden hablar
Pero Vázquez, muy rápido, le advirtió:
Pantoja jamás te va a decir que habla mal de ti, al menos mientras dure ‘Sálvame’.