«El mayor espectáculo televisivo del mundo». Así ha promocionado T5 su nuevo gran talent para los sábados por la noche y el 13 de febrero de 2016 pudimos comprobar cómo la publicidad llega a mentirnos de manera sonrojante. Y es que ‘Got Talent España’ ha vuelto a definir lo que es la vergüenza ajena, un término que no pronunciamos desde ‘Alfombra Roja Palace'(TVE).
Cuando un cadena programa un gran estreno en fin de semana se puede deber a que confía mucho en el producto o que simplemente lo quiere dejar morir. En un principio, cuanto T5 anunció que ‘Got Talent’ iba a ir los sábados, pensábamos que era la apuesta definitiva para una noche que se le resiste, desde hace años, a la cadena de Fuencarral. Pues va a ser que no.
A priori, ‘Got Talent’ lo tenía todo para triunfar: Se trata de un formato de sobra conocido, auquel que parió a auténticos fenómenos mediáticos (Susan Boyle, por ejemplo).
El cuarteto de jueces (Jesús Vázquez, Jorge Javier vázquez, Eva Hache y Edurne) puede que no sea un ejemplo de destreza artística pero es muy popular para los espectadores de la cadena. Y luego, el presentador, Santi Millán, tiene su gracia. Pues ni con esas han sabido hacer un buen programa. Es que no es más que una revisión menos graciosa de ‘Tienes talento’ pero ahí por lo menos tenían a Paquirrín tocándose la barriga en un trono.
Para empezar no sé quienes son Jesús Vázquez, Jorge Javier Vázquez, Eva Hache o Edurne para evaluar a nadie. Yo les admiro todo en lo suyo pero no creo que sean una autoridad en ciertas artes. Eso, en realidad no me importa, solo pido de ellos espectáculo televisivo, que me den juego, risa, ironía, polémica. Pues no.
Los cuatro jueces están en modo buen rollista. Graciosetes pero guionizados. Ellos van de que son muy buenos amigos y se llevan muy bien pero no me interesa. Y como en este país se le tiene mucho miedo a caer mal o a ser muy duros, pues les dan un «sí «a casi todos.
Vamos a ver, esto es televisión, y ser familiar no significa estar tres horas de riendo y dedicándose piropos. Y peor aún. Lo que no se puede hacer es ir de majo y reirse descaradamente de los concursantes. Un pelín de respeto no viene mal.
Jorge Javier Vázquez está encorsetado (como en todo lo que hace cuando sale de su zona de confort). Jesús Vázquez está soso. Edurne posa, sin más, y Eva Hache es simplemente la gracioseta (políticamente correcta del grupo).
En resumen: Por juntar a cinco monstruos (televisivos) no se hacen monstruosidades.
Sé que un programa de este tipo es muy muy duro que hacer. Respeto y aplaudo el esfuerzo y la ilusión del equipo peor no entiendo cómo, desde la cadena, se han podido pasar por alto fallos tan garrafales a nivel técnico. Comprendo que el tono elegido haya sido consciente (a mí no me gusta tanto buen rollo pero en ‘Tu cara me suena’, por ejemplo, les funciona) pero es increíble que nadie se haya llevado las manos a la cabeza por ese sonido tan atronador y mediocre y con un montaje que hace daño a la vista.
A ‘Got talent España’ le falta profundidad de campo. No se nota el lujo. Los planos están muy mal escogidos, los aplausos no cuadran, los cortes de montaje rompen el ritmo y las cámaras no enfocan lo que tienen que enfocar. Es un programa que marea.
Sólo puedo decir que la mayoría de las actuaciones no las vi. Sólo estaba pendiente de lo mal que estaban grabadas.