Bertín Oborne vuelve a demostrar que no tiene pelos en la lengua y no ha dudado en atacar a los que le parodian. El presentador de ‘Mi casa es la tuya’ (T5) ha llamado «miserables» a Andreu Buenafuente y a su equipo por las imitaciones que hacen sobre él en ‘Late Motive’ (#0).
EL ORIGEN DE LA POLÉMICA: BERTÍN Y SUS DECLARACIONES
SOBRE HITLER
El 18 de mayo de 2016, la revista Vanity Fair publicó una entrevista con Bertín Osborne en la que el cantante y presentador aseguró que «Hitler sería mi entrevista soñada».
Saber lo que tiene un tío como ese en la cabeza debe de ser surrealista. Ha habido muchos monstruos, pero él es el más reciente.
Dijo el conductor de ‘Mi casa es la tuya’. Pero lo que realmente llamó la atención es que Osborne asegurase que no entrevistaría, sin embargo, al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
LAS IMITACIONES DE ‘LATE MOTIVE’
Desde la publicación de estas declaraciones, ‘Late Motiv’, programa presentado por Andreu Buenafuente en #0, introdujo una sección titulada ‘En la mía o en la mía’ en al que se parodia el programa de T5 con un falso Bertín entrevistando a Hitler o a Maduro.
EL CABREO DE OSBORNE
El 22 de junio de 2016, en declaraciones a El Correo, Osborne se mostró tajante ante la parodia de ‘Late Motive’ sobre una hipotética entrevista entre él y Hitler:
Me parece de miserables. Han cogido un trozo de una entrevista que me hicieron, lo han entresacado y no es lo que dije. Buenafuente me parece un absoluto miserable por haber hecho eso. Me preguntaron: «¿Qué entrevista te hubiera gustado hacer?». Y, dije: «Ha habido muchos monstruos en el siglo pasado, pero el peor fue Hitler. Y una entrevista a Hitler, para ver lo que ese tío tenía en la cabeza, podía ser interesante». Eso es lo que dije y así se publicó.
De ahí a decir que a Bertín Osborne le gustaría entrevistar a Hitler… Me parece de miserables. Además, lo que tú has visto no es lo que querían haber hecho.
Lo que querían, y al final no hicieron porque el que me iba a imitar se negó a hacerlo, era ponerme en la cocina de mi casa tirando muñecos a un horno y diciendo: «Aquí estoy, pasando el rato». Por eso te digo que, si eso tiene gracia, la tendrá en el culo. Probablemente sea la única cosa en 35 años que me ha encendido.