A la horda que protagoniza el vídeo se la conoce como la Policía Comunitaria. Es una especie de organización ‘justiciera’ que nació allá por 2012 con el propósito de defender contra los cárteles de la droga a los vecinos de algunas comunidades mexicanas de Michoacán, limítrofres con el estado de Jalisco.
Sus competencias, sin embargo, se han salido últimamente de madre, caso que nos ocupa.
En las imágenes se emplean a fondo y sin piedad, en Tabasco, contra dos rateros de poca monta que fueron sorprendidos robando una moto.
No solo les pegan a conciencia, sino que además les propinan descargas eléctricas, todo ello en medio de llantos y vanos gritos de súplica.
Los insultos tipo «hijo de la verga» aderezan el cruel espectáculo.
