Cuatro años, se dice bien pronto, para convocar la fecha del examen de celadores para el Servicio Canario de Salud. Más de 1.400 días jugando con las ilusiones de cerca de 50.000 opositores que desean coger plaza o consolidar el puesto que ahora mismo tienen como interinos. Pues bien, tendrán que seguir aguardando.
La responsable de Recursos Humanos de la Consejería de Sanidad, Carmen Aguirre, se despacha con el hecho de que son muchas las solicitudes habidas y de que no hay ahora mismo lugares físicos donde poder meter a todos los candidatos y, pásmense ustedes, tampoco sabe cómo se podrá abonar el coste de tener que habilitar tanto vigilante de aula e incrementar los miembros del tribunal, que es de obligado cumplimiento que haya al menos un miembro por cada aula. Así de triste y de patético.
