La Unión de Oficiales de la Guardia Civil da un severo golpe sobre la mesa por como se ha gestionado la implantación de la Policía Autonómica de Canarias. Entiende que, en época de crisis, «no es momento para despilfarros» y que sería conveniente una mejor reorganización de los cuerpos habilitados y, en todo caso, completar los catálogos.
Eso sí, ya metidos en faena, la Unión de Oficiales de la Guardia Civil recuerda que funciones de guardia y custodia de la casa de Paulino Rivero en El Sauzal cuesta 11.000 euros mensuales en concepto de dietas. Esta agrupación de la Benemérita subraya que esta misión no le corresponde a la Guardia Civil, sino a los agentes autonómicos».
Julio Garrote Lara, delegado en Tenerife, considera que la falta de decisión de la delegada del Gobierno en las Islas, Carolina Darias, «ha propiciado que se produjesen malentendidos en el Ministerio del Interior», lo que fue aprovechado, insiste, por Paulino Rivero «para plantarse en la capital de España a pedir al Rubalcaba que financiase el desembolso que supone para las Islas este nuevo cuerpo».
Garrote Lara insiste en que «no era momento para ningún despilfarro, pero lo que no concebimos es que, de forma taimada, se haya intentado usurpar competencias que le corresponden a la Guardia Civil o a la Policía Nacional».
El delegado de la UO en Tenerife opina que «lo que no es de recibo es que si las competencias que va a tener la Policía Canaria son las de vigilancia de edificios y organismos públicos, custodia de personas o estar pendientes de cualquier problema en las grandes concentraciones humanas, aún haya agentes de la Guardia Civil o Policías Nacionales realizando estas misiones en edificios de titularidad del Gobierno de Canarias».
