Malos tiempos para el socialismo en Tenerife. No ha gustado para nada la creación de gestoras y la erradicación de primarias y eso no sólo está a un paso de judicializar la vida de la formación, sino que también provoca que salgan voces discrepantes por doquier. Un grupo de militantes disidentes del PSOE de Tenerife no entienden como un político «nefasto y trilero como Aurelio Abreu» puede presidir la comisión gestora insular del partido.
A Aurelio Abreu, senador de la isla,» no se le reconoce ningún trabajo por Tenerife, sus iniciativas parlamentarias son inexistentes, y sueña con mantenerse en un puesto político ya que no se le conoce oficio ni profesión alguna que no sea vivir de los contribuyentes».
Aurelio Abreu, aseguran estos militantes, «ya fue acusado por la Audiencia de Cuentas de graves irregularidades económicas al frente del Ayuntamiento de Buenavista».
Este dirigente político, «traicionero y poco trabajador, se mostro contento en el 2007 cuando salió a la luz la deuda y los pagos hechos sin consignación, que no reflejaban las cuentas oficiales. Son una vergüenza las irregularidades derivadas de esta mala gestión, así como el no reconocer sus fallos, sino intentar maquillarlos. Entendemos que desde el grupo de gobierno deben responsabilizarse de sus errores. A las irregularidades contables hechas públicas, se le suma una auditoria de la consejería de presidencia, que definía la situación económica del Ayuntamiento de Buenavista del Norte cuando el gobernaba como muy mala».
Los socialistas disidentes cercanos a la dirección insular disuelta se alegran de que salgan a la luz todo este tipo de datos sobre la gestión que Aurelio Abreu realizo en Buenavista entre los años 2002 y 2006, absolutamente irregular e incompetente.
Los hechos están ahí, lo dice la Audiencia de Cuentas de Canarias, pagos sin consignar, es decir, dinero gastado «no se sabe en qué» y una deuda, no reconocida, que asciende a un total de 3 millones de euros mal gestionados. Hablamos de cantidades desorbitadas para un municipio de 5200 habitantes.
Además algunas de las alegaciones presentadas por Aurelio Abreu ante sus amigos de ATI sobre este informe de la audiencia, rozan el ridículo. No es serio que una de las alegaciones sea que el Ayuntamiento no hace las cosas bien porque no tiene el programa informático adecuado, o porque hacerlas bien les costaría mucho dinero.
Aparte de esto, alegar que otras corporaciones cometen las mismas irregularidades suena a excusa infantil. Asimismo, la Audiencia de Cuentas contesta a muchas de estas alegaciones, pues éstas no son sino confirmaciones por parte del PSC-PSOE buenavistero de que estas irregularidades existen.
Aurelio Abreu presiono en su momento a los miembros de la Audiencia de Cuentas nombrados por el PSOE para que perdonasen sus pecados e hicieran la vista gorda ante las graves irregularidades detectadas en su gestión municipal.
Sin embargo sabiendo la mala situación económica Aurelio Abreu en todas las legislaturas se subía el sueldo, con el voto en contra de la oposición, lo que supone un autentico acto de cinismo político. Este mal alcalde cobraba uno de los sueldos más altos de la isla, sin realizar ningún otro trabajo que no fuese brujulear y conspirar.
Los socialistas discrepantes enfatizan que hacer negocio económico con el terreno del pueblo, a costa de su privilegiado paisaje y terrenos con alto valor agrícola que están en explotación, es una pésima estrategia y que, apostar por un modelo económico desarrollista que está en franca crisis, no garantiza la creación de riqueza, ni de puestos de trabajo.
También critican el pelotazo del campo de golf en donde se invirtió miles de millones de las antiguas pesetas para no generar riqueza ni empleo y para que algunos se llenasen los bolsillos de las subvenciones públicas otorgadas.
