La remodelación realizada hoy por José María Barreda en el Gobierno de Castilla-La Mancha ha convertido a esta autonomía en la que cuenta con menor número de consejeros en su Ejecutivo de las diecisiete existentes en España.
Barreda ha reducido de diez a siete el número de las consejerías de su Gabinete, después de que en el año 2008 ya aprobara el recorte de otras cuatro de las catorce con las que inició la presente legislatura.
El presidente castellano-manchego ha arrebatado de esta forma a Esperanza Aguirre y Ramón Luis Valcárcel el primer puesto en ese ránking de gobiernos con menos integrantes, ya que la presidenta madrileña dispone de nueve (uno de ellos asume también la vicepresidencia) y de otros tantos el máximo responsable murciano.
El territorio con mayor número de consejeros es el de Cataluña, ya que José Montilla tiene catorce (un vicepresidente y trece carteras), seguida de la Comunidad Valenciana y Andalucía, regiones en las que Francisco Camps y José Antonio Griñán reúnen trece personas en su Ejecutivo (tres desempeñan a la vez cargo de vicepresidente en el caso valenciano).
Juan Vicente Herrera en Castilla y León y Miguel Sanz en Navarra disponen de doce (dos ejercen en ambos casos, además, como vicepresidentes), los mismos con los que cuenta Francesc Antich en Baleares y Marcelino Iglesias en Aragón (que tiene un vicepresidente y once consejeros).
Con once colaboradores directos formó su último Ejecutivo el presidente de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, quien lidera un grupo en el que hay un vicepresidente, otro que se responsabiliza a la vez de una cartera y nueve consejeros.
Patxi López, Alberto Núñez Feijóo y Vicente Alvarez Areces tienen diez miembros en sus gabinetes vasco, gallego y asturiano, respectivamente.
Son los mismos de los que dispone Paulino Rivero en Canarias, Miguel Ángel Revilla en Cantabria y Pedro Sanz en La Rioja (en los tres casos tienen un vicepresidente que es a la vez consejero y nueve personas más).
