De esta manera “se cubre un hueco de mercado al que la banca llega peor ante el riesgo” que conlleva el arranque de un negocio. La consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo, y el presidente de Iberaval, José Rolando Álvarez, firmaron hoy en Valladolid el acuerdo para la puesta en marcha de este programa de financiación cuyo objetivo es la creación de empleo y facilitar liquidez para que emprendedores, autónomos y pymes que tengan un proyecto le puedan poner en marcha. “Más fácil no se lo podemos poner”, indicaron ambos.
Según el acuerdo, el producto impulsado por la Junta, a través de la Agencia de Innovación, Financiación e Internacionalización Empresarial (ADE), en colaboración con la Sociedad de Garantía Recíproca (SGR) de Castilla y León, instrumenta préstamos de entre 6.000 y 600.000 euros para inversión o circulante, que financian hasta el 100 por cien del proyecto en condiciones ventajosas. De esta forma se estipulan “cómodos plazos” de amortización -que van desde los 12 meses hasta los 15 años, con dos de carencia-, significativas reducciones de costes y una línea específica de cobertura de riesgo.
Del Olmo resaltó como novedad que estas cláusulas son aplicables hasta un límite de 200.000 euros y cinco contratos por empresa y para un periodo máximo de cuatro años, la cobertura de riesgo hasta el 20 por ciento del importe del crédito suscrito, lo que, en su opinión, contribuirá a reducir las dificultades de acceso a los mercados que todavía encuentren pymes, emprendedores y autónomos por falta de garantías. «No hay otro producto igual en las sociedades recíprocas de España, el mejor», señaló Álvarez que animó a las empresas a retomar la inversión