RUTAS POR LA PROVINCIA DE SORIA

Calatañazor, donde Almanzor perdió el tambor

Calatañazor, donde Almanzor perdió el tambor
Panorámica de Catalañazor Soria ni te la imaginas

A dos kilómetros del pueblo se halla el Espacio Natural del Sabinar de Calatañazor con un pequeño bosque de sabina albar, algunos de cuyos árboles superan los tres siglos de antigüedad

 

Catalañazor es una de esas joyas Patrias en las  que solo con llegar a poner un pie en ella, un escalofrío recorre todo tu cuerpo y sabes que será uno de esos lugares imborrables en la memoria. 

Recorres las tierras sorianas y de pronto llegas a un pueblecito donde parece que el tiempo se ha paralizado donde si no fuera por los turistas que pasean por sus calles, realmente creerias que has sufrido una regresión a la  Edad Media.


De nombre difícil, enrevesado, Calatañazor conserva su arquitectura rural mágicamente intacta desde el medievo.

El Pueblo, que no tiene más que seis o siete calles y parece deshabitada, de hecho tiene 57 habitantes censados en el Municipio, tiene un castillo medio derruido que se asoma a un valle precioso, llamado Valle de la Sangre, supuestamente por el color de las aguas del rio que recorre el  mismo.

Todo en el pueblo es como un regreso al pasado, Las chimeneas construidas a la vieja usanza sobresaliendo de los viejos tejados, los rústicos muros construidos con barro, piedras y maderas, los portones, los antiguos herrajes, la calle Mayor con sus soportales, pequeñas tiendas para satisfacer a los cientos de turistas que recorren diariamente sus calles y que compran una miel de una exquisita calidad.

La vía de acceso es la N-122 de Soria a Valladolid, a 25 Km de Soria se toma el desvío por la SO-P_5026. La distancia desde la capital es de 33 Km.

  

Los árabes le pusieron de nombre Kalat al-Nasur (Castillo del Buitre) que sigue siendo muy apropiado pues aún son observables muchos ejemplares de buitres desde su altura.

En julio de 1002 en la Batalla de Calatañazor los ejércitos de León, Castilla y Navarra infligieron una sangrienta derrota al del caudillo moro Almanzor; según Al-Maqqari – autor musulmán del siglo XVII– allí Almanzor pudo haber sufrido la herida que un mes después, en Medinaceli, causó su muerte. Se popularizó el dicho “En Calatañazor, Almanzor perdió el tambor”. A eso aluden los versos que le dedicó en 1922 Gerardo Diego y que se recogen en una lápida de bronce sobre el monumento a Almanzor. Dados los errores que incurren las crónicas de la época algunos historiadores creen que esa batalla fue más mito que realidad. 

Calle Mayor

En 1456 el rey Enrique IV confirmó los privilegios de la villa, algo que también hicieron los Reyes Católicos (en 1477) y el rey Carlos I (en 1530). Esos manuscritos se conservan en el museo instalado en la parroquia actual. De su importancia da idea de que en 1460 era la cabecera de una Comunidad de Villa y Tierra que abarcaba dieciocho pueblos.


En el siglo XVII pasó a formar parte del ducado de Medinaceli. A comienzos del siglo XIX dejaría de ser un señorío para convertirse en municipio constitucional, incorporando años después las aldeas de Abioncillo y Aldehuela de Calatañazor. Fue declarado Conjunto Histórico Artístico Nacional en 1962. En Calatañazor se grabaron escenas de las famosas películas Campanadas a medianoche (Falstaff, 1965) de Orson Welles y Doctor Zhivago (1965) de David Lean.

 


 Sobre una gran peña amurallada, en la que también están las ruinas de su castillo, encontramos la épica villa de Calatañazor. A la derecha, antes de entrar en el recinto amurallado, se halla la Ermita de la Soledad, románica, de una sola nave cubierta con bóveda de cañón apuntado, ábside con bóveda de cuarto de esfera, tres aspilleras o saeteras (que denotan su edificación como parte de las defensas de la villa), círculos en relieve y puntas de diamante. Conserva un rico muestrario de canecillos antropomorfos y animalísticos y la figura de un músico sentado entre bellas cornisas. La portada de triple arquivolta, está decorada con motivos vegetales. Cerca de ella, rodeada de vegetación, se encuentran la portada de la Antigua Iglesia de San Juan Bautista.


La visita se realiza a través de una calle empinada que asciende a través de la muralla, está pavimentada con canto rodado. A ambos lados de esta calle principal, así como en las adyacentes, se pueden ver originales ejemplos de arquitectura popular de la zona, con siglos de antigüedad; se trata de casas construidas de forma un tanto tosca, en piedra y adobe; con chimeneas cónicas que en su mayoría han sido cubiertas para impedir la entrada de la nieve en invierno, recordando a las espantabrujas del Alto Aragón. Algunos edificios cuentan con soportales apoyados sobre columnas de madera de enebro, las habitaciones añadidas a las casas sobre el soportal fueron construidas en ladrillo y con madera vista, en contraste con la piedra del resto del cuerpo principal de estos edificios. También merecen atención las rejerías y picaportes de los mimos. Se trata de un conjunto que ha conservado extraordinariamente bien su ambiente; para comprender el modo de vida local puede visitarse el museo etnográfico instalado en la calle Real.

La Iglesia de Santa María del Castillo tiene su fachada principal de estilo románico. Incorpora un gran rosetón, tres arquillos ciegos; resulta muy inusual su alfiz de estilo árabe enmarcando su portada románica de tres arquivoltas. Fijarse en la arquivolta intermedia, especialmente decorada; todas ellas se sustentan en capiteles con aves, grifos y motivos vegetales. Se trata de un edificio de planta de salón, con una sola nave, al que se le adosó una torre en su fachada norte. El ábside fue reedificado en el siglo XVI en estilo gótico tardío, en tanto que la nave y el coro son del siglo XVIII. En su interior hay una pila bautismal datada en el siglo XI y un importante retablo mayor del siglo XVI, con la talla románica de Nuestra Señora del Castillo. También fijarse en el importante Cristo del Amparo, también gótico. En su interior también hay un Museo que incluye tablas flamencas, como la de la Virgen Dolorosa del siglo XV, y otras castellanas que ver en Calatañazor; así mismo esculturas, custodias de plata y otros objetos artísticos, como la valiosa colección de Cartas-puebla, en la que figuran las confirmaciones de sus privilegios.

En la Plaza Mayor se ha instalado la llamada “Piedra del abanico”, un fósil de hojas y tallos de palmera, al que se le atribuye una antigüedad de entre 11 y 20 millones de años. En ella se encuentra también el Rollo-picotade la justicia acerca del cual se relatan leyendas de brujería.

Del Castillo del siglo XIV y XV queda la Torre del Homenaje; edificada en mampostería con sillería de refuerzo en las esquinas. Algunas de las piedras indican que pertenecieron a la fortaleza árabe. Del lado del pueblo cuenta con un foso y del lado del valle conserva una parte de la muralla, también los lienzos noroeste y sur, con una puerta pequeña. Al pie del castillo se han encontrado tres sepulturas antropomorfas excavadas en roca del siglo X. El castillo fue propiedad de Doña María de Molina, los Padilla y los duques de Medinaceli.

A dos kilómetros del pueblo se halla el Espacio Natural del Sabinar de Calatañazor con un pequeño bosque de sabina albar, algunos de cuyos árboles superan los tres siglos de antigüedad. A siete kilómetros, en dirección a Muriel de la Fuente, está el paraje de La Fuentona, que ha sido declarado Monumento Natural, y es el lugar del nacimiento del río Abión. Más adelante recibe las aguas de la fuente de la Calabaza y constituye un cañón que se puede atravesar por pasarelas La Casa del Parque del Sabinar y de la Fuentona, en Muriel de la Fuente, está ubicada en el antiguo palacio de Santa Coloma. Desde ahí se puede ir al Parque Natural del Cañón del Río Lobos.


 Catalañazor, donde Almanzor perdió el tambor. ¿De dónde viene la frase? 

Todos hemos escuchado la famosa frasecita de Almanzor y su tambor, todo viene de la última razia en 1002 que hizo Almanzor contra los cristianos.

A su vuelta de San Millán de la Cogolla, tuvo un encontronazo contra  las tropas cristianas. Almanzortenía ya una avanzada edad  y estaba enfermo de gota; pero además sufría problemas de insomnio, infecciones en el riñón úlceras en el estómago; por ello quiso que la vuelta de la razia fuera rápida aquejado de la gota, sobre todo.


Pero a mitad de camino, a la altura de Calatañazor, un pueblo de Soria, la leyenda cuenta que allí Almanzor perdió su amuleto, un tambor, por lo que perdió la batalla que se dio allí  frente a las tropas cristianas. Y esa derrota fue la más dolorosa de todas, no sólo ser laprimera derrota que sufrió, sino porque él resultó herido.

Sus compañeros al verle herido y agonizante por su enfermedad, quisieron trasladarle cuanto antes a un lugar adecuado para poder curarle las heridas; y lo llevaron a Medinaceli, enSoria. Allí murió dos días después.

Datos prácticos

Distancias

Soria 32 km, Madrid 161 km

Aparcamiento

Sin dificultad

Altitud

1059 m

Habitantes

57 (2013)

Fiestas

Fiestas del Santo Cristo (segundo fin de semana de septiembre)

Otros eventos

Jornadas musicales de Calatañazor (sábados de agosto), Jornadas mozárabes de Calatañazor (fines de semana de noviembre, resto del año concertar). En Casa Rural de Calatañazor, recreación vida siglo X en vestimenta, música, baile y comida

Otros destinos próximos

Abioncillo y Aldehuela de Calatañazor, Muriel de la Fuente, Nafría la Llana, La Fuentona, El Cañon del Río Lobos, San Esteban de Gormaz

 

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