El Gobierno de Aragón, en manos del PP y el PAR, prepara un borrador de una futura ley autonómica de uso, protección y promoción de las lenguas y modalidades lingüísticas propias de la Comunidad. Es la conocida como ley de lenguas. Y vendrá a reformar la existente –aprobada en diciembre de 2009– que imprime un «carácter impositivo».
La nueva norma, según consta en el borrador, «pone énfasis» en la promoción, protección y conservación de las lenguas que serán, de una u otra manera, oficiales en Aragón. La persona encargada de llevar a las Cortes de Aragón la propuesta es la consejera de Educación, Universidad, Cultura y Deporte, del PP, Dolores Serrat.
PARA EVITAR «IMPOSICIONES DE FUERA» DE ARAGÓN
Ha sido la propia Serrat la que ha puesto en pie de guerra a toda la comunidad nacionalista en Cataluña. El motivo no es otro que denominar por ley aragonés oriental a la variante del catalán que se habla en la parte oriental de Aragón, lo que los nacionalistas catalanes denominan la Franja. De ahí es oriundo, por ejemplo, el mismo Josep Antoni Duran i Lleida, portavoz de CiU en el Congreso.
Para Serrat, la nueva norma (todavía no aprobada) «respeta a las lenguas y modalidades lingüísticas, defendiéndolas como inequívocamente aragonesas y, por lo tanto, evitando que nos puedan venir imposiciones de fuera de nuestra comunidad autónoma».
La referencia, pese a no explícita, es clara. El Gobierno de Aragón se ha cansado que desde Cataluña digan qué se tiene que hacer en el ámbito cultural y lingüístico.
El proyecto de ley «no está hecho contra nadie, sino para todos, a favor de la defensa de nuestro patrimonio lingüístico como parte singular y destacada de nuestro patrimonio cultural», ha señalado Serrat.
MANTENDRÁN LOS CENTROS BILINGÜES
La norma establecerá la relación entre los ciudadanos y la Administración autonómica. Los primeros podrán dirigirse a la segunda en las lenguas y modalidades lingüísticas propias de Aragón y la institución «tendrá la facultad de responder» en esas lenguas y modalidades lingüísticas, «pero sin ningún género de imposición».
En lo referente a las escuelas, el español seguirá como lengua vehicular pero el aprendizaje de las lenguas y modalidades lingüísticas se podrán dar «en cualquier nivel y etapa educativa, pero, de forma especial, en las zonas de uso histórico de las mismas».
El Gobierno de Aragón ha recalcado que no piensa suprimir los centros bilingües existentes en la actualidad y que será el Ejecutivo autonómico el que declarará las zonas y municipios de utilización, una vez hay oído los ayuntamientos afectados.
LOS NACIONALISTAS EN TROMBA CONTRA LA AUTONOMÍA DE ARAGÓN
El borrador unifica la Academia de la Lengua Aragonesa y la Academia Aragonesa del Catalán en la Academia Aragonesa de la Lengua, que deberá asesorar al Gobierno autonómico y será la institución científica oficial que fijará las normas de uso de las lenguas y modalidades lingüísticas propias.
Esta serie de reformas, que llevará el PP a las Cortes de Aragón para su tramitación parlamentaria, no antes del próximo mes de septiembre de 2012, ha hecho que desde todos los puntos cardinales del nacionalismo catalán hayan disparado dardos verbales de todo tipo contra el PP y el Gobierno de Aragón.
ERC ha llevado el tema al Congreso. ICV-EUiA ha presentado una propuesta en el Parlament de Cataluña para declarar que el aragonés oriental no existe y sí la lengua catalana. Dolors Camats, portavoz de los ecosocialistas, ha indicado que «desde el Parlament no podemos estar al margen del mal que este tipo de decisiones pueden hacer a la permanencia y vivencia del catalán en Aragón».
Artur Mas, presidente autonómico, de viaje por Estados Unidos, se ha puesto él y el Gobierno de la Generalidad a disposición de los hablantes de catalán en Aragón. Duran i Lleida considera que el cambio de nombre de la lengua es una nueva «ofensiva» del PP contra el catalán.
El PSC, por su parte, ha pedido a CiU que rompa su «alianza estratégica» con el PP por considerar una actitud «hostil» de los populares contra la lengua catalana.
«OBSESIÓN DE ALGUNOS POR LOS PAÍSES CATALANES»
Este tipo de acciones y reacciones se pueden entender en un contexto de permanente tensión entre los nacionalistas catalanes y el Gobierno de Aragón. Así lo ha entendido el PP catalán. Por ejemplo, el diputado autonómico Santi Rodríguez, que no comparte el cambio de nombre, lo entiende: «Es la consecuencia de la obsesión de algunos por los Países Catalanes».
El término, originariamente lingüístico, para definir las zonas en las que se habla regularmente y de forma reconocida el catalán, en todas sus variantes, ha sido convertido por el mundo nacionalista en un arma política para la reivindicación de un hipotético Estado formado por Cataluña, Comunidad Valenciana, Islas Baleares, la zona de Aragón que se habla catalán y una parte del sur de Francia.
Frente a este tipo de actitudes, pancatalanistas, han surgido entidades cívicas en Aragón y la Comunidad Valenciana, sobre todo, que rechazan de plano todo lo que tenga que ver con Cataluña.
Así, la Plataforma Aragonesa No Hablamos Catalán ha pedido este miércoles –20 de junio de 2012– que la Generalidad de Cataluña corrija unos mapas en las webs de la Administración autonómica en los que aparecen zonas de Aragón como parte del patrimonio de la Generalidad [VER WEB].
Esta plataforma ha calificado los mapas de «desaguisados» y ha pedido a CiU «que no interfiera en la política aragonesa» porque «los aragoneses somos lo suficientemente maduros para tomar nuestras propias decisiones».
Además, la entidad se ha mostrado satisfecha del borrador que ha presentado el Gobierno de Aragón en relación a las lenguas:
«Todas las declaraciones que estos días están llegando de Cataluña son ofensivas para Aragón. Incluso Josep Antoni Duran i Lleida ha reclamado que él es de un pueblo de Huesca y habla catalán, a lo que desde la Plataforma Aragonesa No Hablamos Catalán le preguntamos ¿por qué entonces cuando está en Cataluña y sale en la televisión catalana no habla como hablan los habitantes de su pueblo? ¿Por qué habla en catalán en la TV3? Y si tan orgulloso está de ser de un pueblo de Huesca, ¿por qué lidera un partido nacionalista catalán en lugar de militar en una formación aragonesa?».
Para más inri, Serrat es catalana. La consejera del Gobierno autonómico de Aragón nació en Ripoll en 1955 y se trasladó a Zaragoza con 18 años. Allí se casó y formó familia. Una «maña, pués», asegura en su blog.