Un expolicía y detective de la empresa Método 3 ofrece sus dosieres secretos de políticos, jueces y empresarios
El Cuerpo Nacional de Policía (CNP) dispondrá de multitud de expedientes de la agencia de detectives Método 3.Un policía prejubilado, extrabajador de Método 3 -empleado ahora en otra empresa privada y dedicado a la docencia universitaria- ofreció este 14 de febrero de 2013 a la Jefatura Superior de Policía de Barcelona los archivos de audio de esa reunión, así como decenas de informes «sensibles» que manejaba la agencia de detectives privados y que incluyen investigaciones a responsables políticos, empresarios, jueces y fiscales.
El inspector en excedencia fue jefe de una unidad en la policía de Barcelona durante siete años. En 2010 dejó el cuerpo y se integró en el equipo de Método 3, donde se hizo cargo del departamento de informática forense.
El pasado septiembre abandonó la agencia, que tuvo que afrontar un expediente de regulación de empleo. La actividad de Método 3 está extinguida desde hace unos días.
Según fuentes cercanas a la agencia, no había dinero para pagar al policía la cantidad que se le adeudaba por parte de sus servicios, por lo que este se llevó presuntamente algunos equipos informáticos y material; entre otras cosas, cintas de audio y vídeo con material sensible.
Ese material es el que este jueves ofreció a la Brigada de Investigación Tecnológica.
El uso de micrófonos ocultos -lo que puede suponer un delito de revelación de secretos- era un procedimiento «muy poco habitual» en la agencia, según fuentes cercanas al caso.
Revela ‘El País’ que la mayoría de investigaciones sobre personalidades relevantes se limitaba, «por la escasez de medios y personal cualificado», a la mera consulta de documentos administrativos -bases de datos de Hacienda, la Seguridad Social, etcétera- y seguimientos.
La agencia elaboró a lo largo de su existencia alrededor de 20.000 informes de todo tipo
La red de escuchas, grabaciones secretas e informes realizó más de 500 informes sobre políticos catalanes, pero también de PP y PSOE, empresarios, personalidades y destacados miembros de la sociedad civil.
Según informa La Vanguardia, estos informes fueron encargados y pagados por un gran abanico de formaciones políticas a la agencia Método 3 y posiblemente a otras firmas del sector.
Entre los clientes están los socialistas del PSC, los convergentes de CiU y hasta los populares del PPC.
La Jefatura Superior de Policía de Cataluña ha organizado un equipo especial para indagar presuntos casos de espionaje político que contará con refuerzos de las unidades centrales de Madrid.
La puesta en marcha de este grupo responde a la denuncia que el PP ha interpuesto por la grabación secreta del encuentro entre Sánchez-Camacho y la exnovia de Jordi Pujol Jr., Victoria Álvarez, en julio de 2010 en el restaurante La Camarga.
Presuntamente, el exsecretario de organización del PSC, José Zaragoza, encargó a Método 3 la grabación secreta de la cita.
El Cuerpo Nacional de Policía otorga gran importancia a la relación personal y profesional entre Zaragoza y Anna Villena Barjau, asesora jurídica del PSC, y su hermana Elisenda Villena Barjau, detective que trabajó hasta hace pocos meses en Método 3 y que asesoraba a este partido en cuestiones de seguridad, como barridos para detectar escuchas o micrófonos.
Fuentes cercanas a la investigación confirman que el episodio de Sánchez-Camacho y Álvarez ha destapado un entramado de impredecible alcance.
Aunque la investigación se encuentra en una fase inicial, fuentes cercanas al caso señalan que el tipo y número de afectados por el espionaje es muy amplio.
«Se trata de políticos de primera línea», señalaron estas fuentes que añaden que, por el momento, son políticos de CiU los que encabezan la lista de afectados.
La lista de clientes de Método 3 ha sido muy larga e incluye encargos de varios partidos o, como mínimo, de políticos de formaciones como CiU, PSC y PP, además de instituciones como el FC Barcelona durante el mandato de Joan Laporta y mientras Joan Oliver y Xavier Martorell, actual director de Servicios Penitenciarios de la Generalidad, formaban parte de la dirección del club.
Cámaras en La Camarga
Método 3 trabajó para La Camarga en abril de 2011 colocando durante cinco semanas cámaras de vídeo camufladas. Según la directora del establecimiento, se montó el dispositivo de grabación debido a un problema laboral con un empleado. La factura, por un total de 4.613,80 euros contabilizando el IVA, fue emitida el 11 de abril.
La directora del restaurante, Irene Vidal, explicó a La Vanguardia que las cámaras estaban en el office de la cocina y no tenían ninguna visión del comedor. También añadió que se contrataron los servicios de la agencia ante la sospecha de que un empleado desleal estaba robando comida de las neveras.
El martes, Irene Vidal negó conocer Método 3 y a sus propietarios, pero rectifica a medias:
«La verdad es que no me acordaba de que fueron ellos quienes instalaron las cámaras cuando dije que no les conocía, cosa que mantengo».