Se va a decidir sobre la independencia de Cataluña, y aquello que vote la gente va a tener consecuencias inmediatas
Cada día que pasa se hace más evidente el mal ambiente entre CDC y UDC a costa del plan independentista que promueven Artur Mas y Oriol Junqueras.
Las debilidades del plan independentista promovido por CiU y ERC son cada día más evidentes.
La advertencia del líder de una de las formaciones impulsoras del proyecto, Josep Antoni Duran i Lleida (UDC), en el sentido de que las elecciones del 27 «no pueden ser consideradas como un plebiscito», han generado el malestar entre sus socios.
Este sábado, el presidente de la Generalidad, Artur Mas, y el coordinador de CDC, Josep Rull, respondían asegurando que la cita electoral debe considerarse como unas elecciones plebiscitarias, y este domingo la secretaria general de ERC, Marta Rovira, también ha salido al quite de la cuestión señalando que su formación garantizará el carácter plebiscitario y constituyente de la cita electoral.
Críticas a Duran por «sembrar dudas constantes»
En un artículo publicado en El Punt Avui, Rovira ha alertado del «pesar» y la falta de «fervor y entusiasmo» con el que algunos firmantes del acuerdo «han vivido este proceso», en referencia a Duran i Lleida, al que ha acusado de tener una «voluntad impertérrita de desnaturalizar cualquier acuerdo, de sembrar dudas constantes sobre los compromisos adquiridos» y de «echar agua al vino».
«¡Ya basta!», ha añadido.
«En lo que no hemos de perder más energías ni tiempo es en discutir lo que ya está acordado. Así que dejémonos de historias: las elecciones serán plebiscitarias porque la gente lo decidirá votando o no independncia. Porque de eso van estas elecciones del 27 de septiembre, para obtener el mandato democrático que no conseguimos el 9 de noviembre. Y así se recogerá en los programas electorales. El nombre no hace la cosa y será el voto de la gente el que decidirá y determinará las mayorías en la Cámara [autonómica]».
«Despedir a la casta catalana»
Rovira ha indicado que «a la vez, estas también serán unas elecciones constitutivas para hacer un nuevo país, para superar el statu quo autonomista, para despedir a la casta catalana, para superar el enrocamiento del establishment y sus represententes».
Según la dirigente de ERC, «si la vieja política todavía se cree que el futuro lo determinarán cuatro políticos u oligarcas encerrados en un despacho, están arreglados».
«Este tiempo ha pasado y acabarán por llevarse y poner fuera de lugar a todos los que se aferran al pasado y a hacernos pasar por el enderezador constitucional».
Si hay mayoría independentista tras el 27S, «la proclamaremos»
La número dos de ERC ha insistido en que el 27S son «unas elecciones para la independencia», «por un nuevo país».
«Y como este es el acuerdo y no otro, esto es lo que defenderemos lealmente».
«Por si alguno todavía batalla para volver a hacer lo de siempre, para aplicar cambios cosméticos: ¡aquí no hay marcha atrás!».
«No perdamos el tiempo en debates y mensajes vacíos. Vayamos al grano. Si en el próximo Parlamento [autonómico] de Cataluña hay una mayoría absoluta de diputados independentistas, en el nuevo Parlamento la independencia será del todo imparable, la haremos y la proclamaremos».
