Poco después de que Jordi Pujol confesara que tenía cuentas en paraísos fiscales, Artur Mas tuvo que hacer frente a una incómoda pregunta. En la rueda de prensa que ofreció en Madrid tras reunirse con Rajoy el 30 de julio de 2014, le preguntaron por su dinero en similar situación. En concreto se refería a las cuentas que tenía en Liechtenstein (823.000 euros) y Suiza (más de dos millones de euros).
Con argumentos similares a los de Pujol, Mas adujo que era una herencia de su padre. En uno de los casos sostuvo que era el resultado de la venta de la empresa de su progenitor, que posteriormente se descubriría que había cerrado por quiebra. Cuando fue imputado por fraude fiscal, el Gobierno de Zapatero acudió a su rescate ofreciéndole regularizar el dinero con una declaración de la renta paralela. El presidente catalán sólo tuvo que pagar el 16% de lo defraudado.
El 29 de enero de 2015, Isabel Duran ha desvelado en ‘Mas Claro Agua’ (13TV) un clarificador documento de la UDEF sobre el origen del dinero de Mas que había en los paraísos fiscales.
El informe policial explica que ese dinero era en realidad de la familia Pujol y que el padre de Mas era el testaferro de dicho clan:
Respecto al fondo de las cuentas de padre de Artur Mas encontradas en Liechtenstein, en realidad pertenecen a la familia Pujol toda vez, que era quien llevaba las gestiones como fiduciario en dicho país.
La UDEF añade:
Esto es, el padre de Artur Mas, tenía depositado en la Unión de Bancos Suizos la cifra de 2.300.000 m. € aproximadamente, sin poder justificar el origen de dicho efectivo, ni declarar actividad lucrativa alguna, salvo la de realizar gestiones esporádicas a Jordi Pujol y Lluís Prefaneta.