Nacen dos nuevas crías de oso negro en la Vall d’Àneu

Nacen dos nuevas crías de oso negro en la Vall d'Àneu
. EFE/Archivo

Unas imágenes tomadas por el sistema automático de fotografía del Departamento de Medio Ambiente de la Generalitat en la Vall d’Àneu (Lleida) han confirmado que una hembra de oso negro ha tenido dos crías, que se sumarían a los otros dos cachorros y su madre avistados hace unas semanas en la Val d’Aran.

Los técnicos de Medio Ambiente y el Conselh Generau d’Aran consideran que estas crías de oso negro habrían nacido a finales de enero dentro de una cueva de hibernación, según informan por medio de una nota de prensa.

En 2007, la hembra Hvala tuvo dos cachorros (Pollen y Bambou), hecho que se repitió en 2009 con otras dos crías (Nheu i Noissette) y ahora han nacido dos nuevas camadas con cuatro nuevos osos. En total, en tres años, han nacido ocho crías de oso negro en el Pirineo Central.

La primera hembra con dos cachorros fue avistada este año por unos excursionistas y detectada también con el hallazgo de pisadas en la vertiente francesa del puerto de Salau, en el departamento del Ariège (Francia).

Desde este punto, la osa pasó a la Vall d’Àneu, donde a mediados de julio fue fotografiado en los bosques de Alt Àneu, dentro del Parque Natural del Alt Pirineu.

Medio Ambiente apunta que la osa fotografiada con los cachorros podría ser Caramelles (hija a su vez de Melba y Pyros, nacida en 1997, y que durante los años 2001-2002 tuvo una hija de Pyros, localizada siempre en el Ariège) o una hija de Caramelles.

A principios de mayo del año pasado se observó y fotografió un macho y una hembra en la Vall d’Àneu, procedentes de Salau, por lo que se especula que las crías localizadas hace unos días son fruto de aquel apareamiento.

La segunda hembra y sus dos crías fueron detectadas a mediados de julio en el centro de la Val d’Aran, donde inicialmente se encontraron huellas sobre la nieve que parecían corresponder a una osa y dos oseznos.

Posteriormente se han hecho observaciones y grabaciones de la osa jugando con los pequeños, cachorros de primer año, a la vez que se han recogido muestras de pelos para su identificación genética en la Universidad Autónoma de Barcelona, para establecer su genotipo.

El seguimiento, mediante sistemas automáticos de fotografía, está dando buenos resultados, según Medio Ambiente, ya que además se han logrado fotografías de Pyros y otro oso negro todavía sin determinar.

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