El joven periodista hacía junto a un amigo suyo un programa de radio, La Otra Dimensión, en una radio comunitaria en el municipio de Torres de la Alameda, próximo a Alcalá de Henares. «Nos encantaba el misterio y empezamos las investigaciones», dijo.
Con su cinta de videocassette, Jiménez y su compañero recibió la llamada de un hombre que les quería enseñar un colegio profanado en el sur de Madrid. «Fue impactante observar pintadas con pasión a lo satánico. Me llamó la atención la profanación de la virgen, que me recordó a la escena de El exorcista», explicaba, según recoge Ecoteuve.
Después de vivir esta experiencia, un conde se puso en contacto con ellos para decirles que algo ocurría en las instalaciones subterráneas de su casa, a lo que hoy llamaríamos bodega: «Nos dijo que había extraños sonidos y bramidos que parecían surgir de la misma tierra y que hacían coincidir con visiones de la casa».