En una investigación publicada en The Journal of Sex Research (revista de investigación sobre el sexo) se ha revelado que las mujeres tienen más tendencia a cometer una infidelidad cuando llevan entre seis y diez años de relación.
En dicho estudio también observaron la infidelidad masculina y encontraron que dicho periodo en grupo de hombres era menos específico; en particular, encontraron que los hombres tienen más probabilidades de cometer adulterio después de estar en una relación durante 11 años.
Los investigadores realizaron dos encuestas con 423 personas en la que cada uno de los participantes respondió a una encuesta sobre la importancia de resistirse a la infidelidad. También respondieron a la pregunta de cuántas veces serían infieles si tuvieran la oportunidad de hacerlo.
El estudio también reveló las razones que llevaron a las personas a ser infieles, incluidos factores como el miedo a quedarse solo si la pareja se entera de un posible adulterio, valores morales y razones religiosas. Menos comunes fueron razones como los efectos que tendría en su pareja o en sus hijos en común.
Estos resultados fueron publicados solo unos meses después de que otro estudio descubriera que las mujeres en trabajos específicos tienen más probabilidades de ser infieles.
Según este segundo estudios, las amas de casa son más proclives al adulterio debido al «sentimiento de soledad y una falta de satisfacción en su matrimonio».
«Este sentimiento de soledad está muy presente en las amas de casa, que a menudo pasan muchas horas solas y los maridos no les prestan atención cuando regresan a casa», apunta Christian Grant, un representante de Illicit Encounters, que llevó a cabo el estudio.
El estudio también encontró que los hombres altos, inteligentes y con recursos económicos elevados son más proclives a cometer infidelidades, ya que alimentan sus egos y deseos de esta manera; en este caso no se debe a un sentimiento de soledad. «Sabemos que las mujeres son más sensibles a la presión social que los hombres, y siempre ha habido más presión sobre las mujeres para que adopten un comportamiento sexual apropiado», dijo a The Independent Michèle Binswanger, periodista suiza y autora de Cheating: A Handbook for Women.
«Además, desde siempre han tenido menos oportunidades, pues antes era más común que se quedaran en casa cuidando de sus hijos», añade la periodista.
El enfoque de Binswanger también confirma lo que ya habían sugerido algunos estudios anteriores: que ha cambiado la percepción de las mujeres de lo que implica una relación exitosa y significativa.
«Hoy en día, las mujeres tienen mayores expectativas en lo que refiere a su vida sexual que hace 40 años, quieren experimentar y, son más independientes en general», explica Binswanger, y añade que un gran porcentaje de las mujeres que son infieles a sus parejas no solo se sienten frustradas con su relación, también con su vida en general.
«Muchas mujeres no se sienten deseadas ni escuchadas: se sienten infelices, de modo que empiezan a buscar nuevas emociones», zanja Binswanger.
