Uno de sus amigos lo graba mientras otro se chotea con una mujer riéndose con cara de mema detrás del autobús en el que circulan tras una fiesta salvaje. Son los amigos del rapero neoyorquino de 21 años, Lil Peep, que sus amigos creyeron se encontraba durmiendo. En realidad estaba ya cadáver por una sobredosis de cocaína, xanax y éxtasis.
Su nombre real era Gustav Ahr y mezclaba hip hop. Según los expertos en la materia, tenía una carrera muy prometedora por delante. Tras la noticia de su muerte, algunos tuiteros lanzaron mensajes en los que advierten sobre el daño que ocasionan cierto tipo de drogas.