André Gide decía: «La satisfacción es la única señal de la sinceridad del placer». En una entrevista reciente, Anderson cuneta que se cruzó en el camino de Harvey Weinstein y, aunque segura que jamás tuvo un comportamiento «inapropiado» sexualmente hablando, «si era amenazante».
«Dejé de trabajar en Hollywood porque tuve valor de pararle los pies. Y porque Hugh le llamó para dejarle las cosas claras», según recoge ABC.
A Vladimir Putin, lo conoció en 2009 por su campaña contra la caza de focas. El presidente ruso quiso conocer a la fiera activista, y acabó por invitar a Anderson a su investidura en 2012, aunque la canadiense rechazó la invitación.
Ante las preguntas de Piers sobre un posible «affaire» con Putin, Pamela deslizó que tiene ««una maravillosa relación con Rusia».
VÍDEO DESTACADO: Pamela Anderson le ‘propone un trío’ a Donald Trump