Durante el partido del Everton y el Bournemouth en la sexta fecha de la Premier League, Wayne Rooney sufrió un terrible accidente.
Al minuto 34, el inglés fue golpeado por Simon Francis, defensor del equipo rival, cuando disputaban una pelota, según recoge La Kalle.
El futbolista reaccionó con ira y tras discutir con el árbitro y limpiar su herida, retornó al compromiso.