La gran mayoría de jugadores de la plantilla del FC Barcelona deseaba ver al Manchester City en la final de Milán. Sólo algunos lo hicieron público, como Sergi Roberto o Jordi Alba, pero lo cierto es que la práctica totalidad del vestuario no quería ver al Real Madrid como rival del Atlético en la final de Milán.
La gran esperanza para el partido de este miércoles
en el Bernabéu era el Kun Agüero. Leo Messi comunicó a sus compañeros que había contactado con Agüero y que éste estaba animadísimo y convencido de dar la campanada en el Bernabéu. Sin embargo, la imagen que dio el City fue muy pobre y el Kun Agüero no hizo nada para sobresalir o para liderar a sus compañeros en pos de la victoria.