Isco Alarcón había sido el hombre que más rumores había despertado en los últimos meses con el interés entre otros equipos del FC Barcelona. Los catalanes quisieron aprovechar que el centrocampista malagueño no estaba teniendo todos los minutos que deseaba con Zinedine Zidane y apretó para llevárselo ofreciéndole liderar junto a Messi y Neymar el próximo proyecto azulgrana.
Sin embargo, Zinedine Zidane se acabó ganando al crack malagueño a base de darle mayores responsabilidades y aumentar su confianza llegando a quitarle el sitio a uno de sus jugadores clave como es Gareth Bale, de quien Zidane había dicho el primer día que su puesto en el once era innegociable al igual que Benzema y Cristiano Ronaldo.