Aún se mantiene en la mente de los aficionados las imágenes del delantero Wayne Rooney en un lamentable estado, después de ‘colarse’ en una boda que se celebraba en el hotel de concentración de la selección inglesa. El atacante internacional del Manchester United fue portada de todos los rotativos británicos en evidente estado de embriagadez.
Y Rooney ha esperado el momento para cobrarse su venganza. Tras la rotunda victoria de los ‘diablos rojos’ (4-0) ante el Feyenoord holandés en la Europa League con gol incluido suyo, Wayne no ha perdido la ocasión para desquitarse.
Al finalizar el choque, el jugador fue requerido por la prensa y uno de los temas que salieron a la palestra fue el de la boda.