Costa Rica no se incorporará al Parlamento Centroamericano (Parlacen) a pesar del interés que tiene la Unión Europea (UE) en que este país haga parte en el marco de la negociación del acuerdo de asociación entre ambas regiones, reiteró el canciller costarricense, Bruno Stagno.

En una entrevista que publica hoy el diario La Prensa Libre, Stagno reafirmó que esa decisión es un "capítulo cerrado" y que ahora el interés es encontrar en la negociación con la UE un mecanismo alterno para resolver las diferencias jurídicas en el ámbito centroamericano.

"Tenemos una posición jurídica y políticamente muy sólida. Vamos a tener que acordar un mecanismo para resolver las diferencias de jurisdicción", expresó el ministro de Relaciones Exteriores.

Históricamente Costa Rica se ha negado a formar parte del Parlacen y ha hecho públicas fuertes críticas respecto a la composición y financiación de dicho órgano regional, cuya sede se encuentra en Guatemala.

Stagno recordó que Costa Rica dejó clara su posición respecto a este tema desde la Convención de Viena, en 2006, donde insistió en que la adhesión tanto al Parlacen como a la Corte Centroamericana no podían ser obligatorias en el marco del acuerdo de asociación que se negocia con Europa.

"Para Costa Rica sería inaceptable verse obligada a formar parte del Parlacen, irrespetando el Acuerdo de Viena de hace tres años, donde precisamente se marcó el punto de partida de interés en la negociación", dijo.

El Canciller reconoció que a pesar de esto, "desde que iniciamos las negociaciones estuvimos sujetos a presiones orientadas a revertir nuestra posición, pero Costa Rica fue clara ante los europeos desde 2006. No vamos a aceptar esa renegociación".

La UE ha insistido a Centroamérica en la necesidad de profundizar su esquema de integración centroamericana, pero el Gobierno costarricense ha mantenido la posición de que el modelo europeo no se puede replicar en la región.

"En materia de integración definitivamente no se puede correr; es importante definir plazos, prioridades a través de un sistema intergubernamental y no supranacional. Si nos obligan a una integración donde perdamos autonomía, nos llevaría a una revisión del proceso", enfatizó el Canciller.

Centroamérica y la UE iniciaron la negociación de un acuerdo de asociación que incluye apertura comercial discusión política y cooperación, en 2007, y se espera que el proceso concluya en el primer semestre de este año.