MOTOR-COMPONENTES

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Más de 3.000 trabajadores españoles afectados por "deslocalizaciones" desde el año 2001

Agencia EFE, Domingo, 4 de marzo 2007
Más de 3.000 trabajadores españoles han sido despedidos de sus empresas en los últimos seis años, a causa de las llamadas "deslocalizaciones" de multinacionales extranjeras en el sector de componentes del automóvil.

Una cifra que aumentará en los próximos meses a 5.000 trabajadores, si se hace efectivo el cierre anunciado por la compañía americana de componentes, Delphi, en su planta de Puerto Real, (Cádiz) y el traslado de su producción a Polonia y la India.

Y es que el "movimiento" de factorías hacia los países del Este o hacia países del norte de África donde la mano de obra es más barata y las materias primas se encuentran mas cerca, ha aumentado considerablemente, y lo seguirá haciendo.

Según un informe elaborado por la consultora Pricewaterhouse Coopers, los fabricantes de automóviles en todo el mundo trasladarán una parte de su producción en los próximos cinco años a Europa Central y Oriental.

La consultora estima que estas compañías invertirán en traslados de factorías unos 4.560 millones de euros.

El sector de la fabricación de componentes para el automóvil es uno de los más afectados por esta práctica empresarial típica de una economía globalizada.

En la decisión de mover una fábrica a otro país influyen, además de aspectos sobre el bajo costo de la mano de obra, otros muy variados; como una legislación medioambiental más "permisiva" o beneficios fiscales.

Sin embargo, el informe de Pricewaterhouse advierte que "en muchos casos no es la mejor opción" y se deben estudiar los motivos que impulsan a instalar la fábrica en una nueva ubicación.

Por ejemplo, -dice la consultora- "no tiene mucho sentido trasladarse a una zona con salarios bajos si no se emplea mucha mano de obra". También hay que valorar que la "dificultad de encontrar mano de obra cualificada, hace que cuando se encuentre, los sueldos suban".

El informe de Pricewaterhouse apunta a que el fabricante debe aumentar sus gastos con la creación de nuevas instalaciones o fábricas, ya que cada vez hay menos factorías de automóviles en los países del Este y advierte que la productividad en Europa Central y Oriental es inferior a la de EEUU o Europa Occidental.

En España, los casos más recientes de traslado de factorías relacionadas con la automoción en España son variados y esta es una cronología de los producidos en los últimos 6 años.

En Enero de 2006, la multinacional Zodiac Automotive anuncia el cierre de la planta dedicada a la fabricación de fundas para airbag en la localidad gerundense de Rosas, y deja en el paro a 110 trabajadores, para llevar la producción a Túnez.

Meses más tarde, en septiembre, la firma de componentes de automoción Nacam Ibérica anuncia el cierre de su planta barcelonesa de Sant Boi y la presentación de un Expediente de Regulación de Empleo por extinción de contrato para los 160 empleados. Según los sindicatos, la multinacional lleva tiempo desviando cargas de trabajo a fábricas de Alemania y Francia.

En el 2005, la multinacional TRW, fabricante de elementos de seguridad para automóviles, anuncia el cierre de su factoría de Burgos, en la que trabajan 292 personas, con el objeto de trasladar su producción a otras fábricas de Europa.

Ese mismo mes de enero, y también en la planta que tiene la compañía estadounidense Blackstone en Burgos cierra y deja sin empleo a 308 personas.

El 16 marzo del 2005, la Federación de Metal, Construcción y Afines de UGT denuncia la política de cierre de fábricas que lleva a cabo la multinacional Valeo, para trasladar la producción a Marruecos y al Este europeo.

El cierre afecta a unos 600 trabajadores de Orense, Alcalá de Henares y Móstoles. Además Valeo anuncia un ERE que afectará a 130 de los 538 trabajadores de la fábrica barcelonesa de Martorell.

El año 2004 comienza con el cierre de la planta Autotex en Vacarisses, Barcelona, donde fabrica airbag para coches. La dirección comunica a sus 150 empleados que la factoría de componentes se traslada a la República Checa.

Ya en el año 2002, la compañía de componentes para automoción LEAR, comunica a su comité de empresa el cierre de la factoría de Cervera, Lleida, que afecta a 1.173 trabajadores y el traslado de la parte de la producción de ésta a Polonia.

En el 2001, la multinacional de componentes Delphi Packard fusiona dos de sus plantas, la de Olvega, en Soria, y la de Tarazona, en Zaragoza y deja en el paro a 425 trabajadores de su factoría de Belchite (Zaragoza). Así es como Delphi comienza a trasladar su producción de España a Marruecos y Rumanía.