TV3 y Catalunya Ràdio también usan la "versión catalana"

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Pasqual Maragall felicita a los Príncipes por el nacimiento de... "Elionor"

PD, Martes, 1 de noviembre 2005
No fue un despiste, sino la obsesión porque todo -desde las etiquetas a los carteles, pasando por los nombres- esté en catalán. Pasqual Maragall, fiel a las fiebres lingüisticas del Tripartito, envió ayer un telegrama al Príncipe Felipe en el que se congratula por el nacimiento de la princesa «Elionor».

No ha sido el único en llamar a la recién nacida con la denominación catalana. En todas las informaciones sobre el nacimiento emitidas por los medios de comunicación públicos catalanes, TV3 y Catalunya Ràdio, se habló de la niña como de Elionor.

No cayó en el ridículo CiU, que también mandó una felicitación a los príncipes por el nacimiento de su hija «Leonor».

 Cada cual arrima el ascua a su sardina y aunque son republicanos, los dirigentes de ERC no cabían ayer de contentos por el natalicio de la futura Heredera de la Corona española. Es niña. Y eso supone que habrá que modificar la Constitución para que, aunque tenga hermanos varones, pueda llegar a reinar.

Y si no hay más remedio que cambiar la norma fundamental, ¿por qué no aprovechar y hacer también otros retoques?

La mayoría de los partidos nacionalistas de Cataluña, País Vasco y Galicia defendieron esta tesis tras conocer el natalicio. A primera hora de la mañana, el conseller primer de la Generalitat catalana, Josep Bargalló (ERC), explicó que «el nacimiento de Leonor evidencia los diversos motivos para poner en marcha el proceso de reformas constitucionales».

El dirigente independentista añadió que las palabras pronunciadas por el príncipe Felipe tras el nacimiento de su hija «no hacen más que subrayar la necesidad de modificar la Constitución».

El proceso de reforma es largo y complejo. Requiere de la aprobación de dos terceras partes del Congreso, de la disolución de las Cámaras, de la convocatoria de elecciones, de una nueva aceptación por parte del Parlamento español y de la confirmación de la ciudadanía a través de las urnas en referéndum.

ERC, junto a Eusko Alkartasuna (EA) y Chunta Aragonesista (CHA), no ha ocultado nunca su interés en que se reformase la Constitución, pero la complejidad de este procedimiento hacía muy difícil, por no decir imposible, que su iniciativa prosperase. Ahora, si arranca la reforma para reflejar los derechos de la nueva Infanta, estas formaciones aprovecharán para tratar de que se recojan también sus pretensiones.

La idea de estos partidos es la de variar la redacción del título preliminar para conseguir un nuevo texto que permita «un verdadero Estado plurinacional». Además, ERC pretende lograr que la nueva Carta Magna aborde, entre otras cosas, la creación de un Estado federal, la participación de Cataluña en el extranjero y en la Unión Europea, la participación real de la Generalitat en organismos estatales y el plurilingüismo.

{ladillo}El nombre de Leonor{/ladillo}

Escribe Javier Morán en La Nueva España que es Leonor nombre de etimología incierta, por lo que caben todas las interpretaciones de corte nominalista. Unos dicen que es la forma femenina de León, lo cual le viene al pelo a la biografía de Leonor de Aquitania, mujer tremenda que en el 1141 se fue a la segunda Cruzada y en Antioquía ligó con su tío Raimundo de Poitiers, lo cual supuso que se separase de su marido, Luis VII de Francia, pese a que el Papa intentó evitar el divorcio.

 Tras la anulación matrimonial, casó con Enrique II de Inglaterra. Como este último tenía una amante, Leonor se puso como una leona y sublevó contra el inglés a sus tres hijos, incluido Ricardo Corazón de León. Tal era su vigor que a los ochenta años cruzó los Pirineos para buscar en Castilla a Blanca, que se convertiría en la esposa de Luis VIII, o Luis el León.

Una etimología más de Leonor dice que es la forma antigua castellana de Elionor. Otra habla de que puede proceder del griego «Eleos», o sea, compasión, piedad, como Elena. En clave cristiana, dicen algunos que Leonor significa «Dios es mi luz», por venir de Ellinor, nombre veterotestamentario.

Dicen asimismo que el teatro del Siglo de Oro está lleno de Leonores, por la facilidad de rimar en «or», que pega con honor, por ejemplo, pero también con horror. Esta veta artística del nombre la tiene en el presente la actriz almodovariana Leonor Watling, aparentemente tímida.

Así pues, a esta niña «gordita y redonda», como la ha descrito la reina Sofía, llevará impreso un nombre que da para todo, desde la fiereza a la compasión, así como la facilidad para que le saquen coplas que rimen con candor, o con furor.

Un último apunte. En las listas de nombres de mujer que los padres consultan en internet o en diccionarios al uso, el nombre de Leonor está muy próximo al de Leticia, concretamente, en la misma página. Por tanto, para qué romperse la cabeza.

Y lo que imprima el nombre Leonor en esta futura reina no será conocido hasta dentro de unos cuarenta años, si nosotros o este país llegamos allá.