Tanto Adolf Hitler como Benito Mussolini atacaron el sistema desde dentro
Unas declaraciones del expresidente de Extremadura Juan Carlos Rodríguez Ibarra (PSOE) comparando al presidente catalán, Artur Mas, con el dictador alemán Adolf Hitler han levantado polémica en Cataluña y provocado alguna que otra respuesta airada de dirigentes en la Comunidad.
En una entrevista en Antena 3, Ibarra ha calificado este 7 de marzo de 2013 de «golpismo» el proceso soberanista de Artur Mas y ha lamentado que los españoles no hayan sabido reaccionar.
«Estábamos acostumbrados a que antes la constituciones se las cargaban siempre los golpistas, con metralletas y con tiros».
«Pero a ataques al sistema desde dentro del sistema no estábamos acostumbrados».
El expresidente extremeño ha agregado que a este tipo de procesos sí que los conocen, en cambio, los alemanes y los italianos, porque tanto Adolf Hitler como Benito Mussolini «atacaron el sistema desde dentro».
Las declaraciones de Ibarra han sido ampliamente contestadas en las redes sociales por los internautas y por algunos políticos catalanes.
Reacciones en Twitter
El más contundente ha sido el diputado de ERC en el Congreso Joan Tardà, que ha afirmado en Twitter que «no tiene ninguna duda de que Ibarra, si pudiera, se comportaría como un Milosevic, que también se consideraba de izquierdas pero resultó ser un genocida».
Por su parte, el conseller de la Presidencia y portavoz del Gobierno catalán, Francesc Homs, considera que las declaraciones de Ibarra (PSOE) podrían ser «delictivas» y teme que generen una opinión «peligrosa» sobre Cataluña, por lo que ha apremiado al PSOE y al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, a censurarle.
El consejero de Presidencia y portavoz del Gobierno catalán, Francesc Homs, ha encargado un informe al gabinete jurídico de la Generalitat para que analice si se pueden tomar acciones legales contra el expresidente extremeño Juan Carlos Ibarra por comparar al presidente catalán, Artur Mas, con Hitler y Mussolini.
Artur Mas ha tildado de barbaridad estas palabras.
«Cuando supe que me comparaban con Hitler, Musolini y Tejero pensé que no vendría nadie a este acto tan lucido, y celebro que haya venido tanta gente porque significa que, como mínimo las mujeres, no piensan igual de mí».