El chasco es de aupa, porque ni te puedes imaginar que hay alguien detrás, mirándote desde el otro lado del ‘espejo’.
Y mucho menos, filmando con el teléfono móvil.
La chavala del vídeo protagonizó un incómodo momento luego de que se detuvo en una calle para acicalarse, aprovechando como espejo, la ventanilla de un coche, en la ciudad de Ho Chi Minh, en Vietnam.
La chica aprovechó el reflejo para ajustar su sostén, acomodar su blusa, e incluso, intentar sacar un pelo de su nariz.
Sin embargo, fue en ese instante cuando la ventana del vehículo comenzó a descender y la muchacha comprendió que había sido observada todo el tiempo.
Finalmente, y sin ocultar su rostro de sorpresa, huyó con rapidez del lugar.