El informe de espionaje encargado por el PSdeG

El ‘Watergate’ gallego prueba el control político de la CRTVG durante el bipartito

"El jefe de informativos de la radio sombreaba informativamente la gestión socialista"

El 'Watergate' gallego prueba el control político de la CRTVG durante el bipartito
Emilio Pérez Touriño y Anxo Quintana.

El BNG ejercía una censura directa desde la Xunta, llegando a no convocar a RG y TVG a algunas ruedas de prensa de sus consellerías

Un ‘Watergate’ gallego. Así han calificado los medios de comunicación el caso de espionaje destapado la pasada semana por ‘La Voz de Galicia‘, que sacó a relucir un informe encargado por los socialistas durante el bipartito para investigar la influencia mediática del BNG, la cual contemplaba con grandes dosis de envidia.

Según el diario de Santiago Rey, el PSdeG se valió de la ahora extinta Fundación para a Sociedade do Coñecemento, presidida por Touriño, para encargar a la agencia Torres y Carrera una investigación personalizada de los jefes de prensa de las consellerías meses antes de las elecciones autonómicas.

Un claro gesto de ‘desconfianza’ que les condujo a un gran ‘chasco’: el documento, que califica con dureza las labores de los profesionales analizados, destaca una mejor proyección pública del BNG y una mayor disciplina interna para acatar decisiones en el ámbito de la comunicación.

La consultora Torres y Carrera ha asegurado que «se nutrió de información pública» y «en ningún caso» realizó «ninguna labor de espionaje» para llevar a cabo el análisis sobre la acción de comunicación de los diversos departamentos del bipartito en la Xunta, que abarcó «a todas las áreas», tanto las gestionadas por el PSdeG como las del BNG, así como la comunicación del PP, partido que en el año de la elaboración del estudio estaba en la oposición.

Torres y Carrera explica que el objeto del trabajo era «sentar las bases comunicativas» de la Fundación Galega para a Sociedade do Coñecemento «para que fueran coherentes tanto con los planteamientos desarrollados por la Consellería de Economía en particular, como de la Xunta en general», para lo cual se analizó «el perímetro comunicativo» de todas las áreas del bipartito y del PP.

REACCIONES
El presidente de la Xunta durante el bipartito y de la FSC (entidad acusada encargar el informe), Emilio Pérez Touriño, se ha apresurado a señalar que la información publicada por ‘La Voz’ es «radicalmente falsa».

Así, explica en un comunicado que el gobierno gallego tenía una participación «minoritaria» en esta fundación y que al frente del consejo rector se encontraba un vicepresidente ejecutivo «del sector privado y ajeno a la Xunta», que es quien encargó el informe «en el ejercicio de sus responsabilidades y competencias».

«Ni en mi calidad de presidente de la Xunta ni de secretario general del PSdeG ni como presidente del patronato de la FSC he encargado ni solicitado, directa o indirectamente, el mencionado informe. Nunca he tenido conocimiento ni, por tanto, acceso al mismo, sabiendo de su existencia sólo a través de la mencionada noticia»

Por su parte, el secretario general del PPdeG, Alfonso Rueda, vincula este caso de espionaje a una «descoordinación y desconfianza evidentísima» entre los socios del bipartito, «que se extendía a todas las acciones de gobierno». Así, señala que los partidos que lo integraban lo que hacían «era desconfiar unos de otros y vigilarse con dinero público».

Mientras tanto el BNG «no sabe/ no contesta».

CONTROL DE LA CRTVG
El informe interno encargado por los socialistas para espiar al BNG cuenta con un apartado en el que se analiza el reparto de poderes entre ambos partidos en los medios públicos de comunicación, convirtiéndose en una prueba escrita del control político que se ejercía sobre Televisión de Galicia (TVG) y Radio Galega (RG), cuyo modelo de gestión es calificado de «delirante» en el propio documento.

El estudio destaca una «polarización comunicativa» en la CRTVG acorde con el reparto de roles políticos en la Xunta: sitúa al director general de la compañía en la órbita del PSOE, al igual que el de la RG, mientras que el de la TVG era, al parecer, del «bando» nacionalista. Un reparto que continúa «en cascada» sobre los jefes de informativos y programas, generando continuos conflictos ideológicos.

El informe sostiene que, por ejemplo, el director de Radio Galega, del PSOE, no tenía los instrumentos para «controlar los movimientos» de su jefe de informativos, que «sombreaba informativamente la gestión de Touriño en particular, y del Gobierno socialista en general».

No ocurría lo mismo en la TVG, donde el jefe de informativos no era tan eficiente como su homólogo de la radio para «limitar la proyección mediática» de los nacionalistas.

El BNG ‘movía ficha’ también ejerciendo una censura directa desde la propia Xunta, llegando a no convocar a RG y TVG a algunas ruedas de prensa de sus consellerías, o negándose a publicitar su actividad institucional en la web de la Xunta junto a las consellerías del PSOE.

 

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído