Levantarse por la mañana con ganas e intervenir en la polémica entre España y Cataluña. En persona y a cambio de ingentes cantidades de dinero. Negociar pactos y contraprestaciones, hacer ‘fontanería’ de Estado siendo un recién llegado.
Solamente echándole todo el morro del mundo. Una misión casi imposible que puede salir cara. Y que, como es lógico, tiene consecuencias.
Si no que se lo pregunten a Francisco Nicolás Gómez Iglesias, un joven de apenas 20 años con residencia en Madrid, vinculado a las nuevas generaciones del PP, a la Fundación FAES y estudiante de CUNEF, que presuntamente ha querido forrarse haciéndose pasar por un agente del CNI desplazado a Cataluña para tratar de ‘mediar’ en las tensas relaciones entre el Gobierno Central y el clan Pujol (La Policia detiene a Oleguer Pujol mientras registran sus inmuebles en Madrid y Barcelona ), según ha podido saber este medio de fuentes conocedoras del caso.
La Policía Nacional lo ha detenido este martes después de haber protagonizado una auténtica farsa -entre otras- en la que supuestamente habría logrado sacar unos 25.000 euros. La pregunta lógica pasa por saber si el pequeño ‘espía’ actuaba solo.
Porque esta no es la única ‘gesta’ este supuesto pequeño delincuente. Los investigadores creen que Francisco Nicolás estafó a decenas de personas simulando tener contactos en el Gobierno, la Casa Real y los servicios secretos.
Se colaba en reuniones de alto calado -consiguió acudir a la mismísima coronación de Felipe VI- o visitaba empresarios y les ofrecía la participación en negocios a través de sus conexiones con el poder político y económico. Lo que resulta ciertamente inverosímil es que el alto standing se creyera las ‘invenciones’ de un chiquillo imberbe. Pero parece que lo hicieron. La policía acusa al joven de falsedad, estafa y usurpación de identidad.
Este medio ha conseguido ponerse en contacto con la familia del joven, con residencia en Madrid, pero han declinado hacer declaraciones y se han limitado a confirmar la detención del joven.
La policía trata ahora de cuantificar el dinero que habría podido conseguir y si en esta presunta estafa hay algún objetivo más allá de la mera obtención de dinero por parte del supuesto impostor.
En nombre de ‘la vice’
Según las mismas fuentes, y en el caso particular de Cataluña, Francisco Nicolás llegó a contactar con el abogado de los Pujol, Cristóbal Martell, y con el propio patriarca Jordi, y les solicitó distintas cantidades de dinero a cambio de mejorar su situación ante la justicia.
La ‘excusa’ que utilizaba el joven, de apariencia aniñada, era que el Centro Nacional de Inteligencia se había quedado «sin fondos reservados» y que acudía de parte de la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría en misión especial para recaudar lo que pudiera.
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