Un jugador de futbol gasta al año unas 130 camisetas de media entre las que se ponen en los encuentros, las que se intercambian o las que son sustituidas por otras cuando hay una mancha de sangre de por medio.
Según recoge futbol finanzas, así lo desvela Diario Gol, que son cifras correpondientes a equipos ricos.
En cualquier caso, hablamos de una media de dos camisetas por encuentro en la peor de la circunstancias.