Hasta ahora era lógico pensar que cuanto mayor se hace uno, más probabilidades tiene de morir. Pero un reciente estudio asegura que la tasa de mortalidad se estabiliza sorprendentemente a partir de los 80 dando casos de personas centenarias que han superado las 11 décadas de vida.
Según relata Miguel Jorge en el portal Gizmodo, el equipo de Kenneth Wachter autor de este trabajo en la revista Science, cuenta que las tasas de mortalidad se aceleran hasta los 80 años, luego se desaceleran, y más tarde se estabilizan entre las edades de 105 a 110.
Es verdad que el estudio habla de tasas de mortalidad no de probabilidades de llegar a edades tan avanzas porque lo cierto es que solo 2 de cada 100.000 personas viven hasta los 110 años o más.
Pero lo que también es cierto es que superados los 80 años, entre la población que alcanza esa edad, la tasa de mortalidad decelera para volver a estabilizarse a partir de los 110. Es como si existiera una horquilla de 30 años en lo que esquivamos mejor a la muerte.
Según el estudio, a los 105 años de edad las probabilidades de sobrevivir a tu cumpleaños número 106 están en el 50%. Y lo mismo ocurre a los 107, y otra vez a los 108, 109 y 110.
Wachter, profesor emérito de demografía y estadística de la Universidad de California en Berkeley:
El objetivo era resolver una controversia sobre si la mortalidad humana tiene la misma forma que la mortalidad en muchas otras especies. Se ha encontrado que las tasas de mortalidad se estabilizan en animales de laboratorio, como las moscas mediterráneas de la fruta y los gusanos nematodos. Creemos que lo hemos solucionado.
Para el estadístico Holger Rootzen, de la Universidad Tecnológica de Chalmers se puede rechazar la noción de un límite estricto para la vida humana en según el cual en en los próximos 25 años nadie alcanzará los 128 años. Sea como fuere, el límite se va ampliando cada año que pasa y aún no sabemos si puede tener un tope.
Durante el acto de apertura del primer Congreso Internacional de Longevidad y Criopreservación organizado en Madrid por la Fundación Vidaplus, su presidente, Txetxu Mazuelas, hablaba sobre estos límetes al recordar el caso de Jeanne Louise Calment que murió en 1997 a los 122 años y 164 días.
