Echamos en falta liderazgo, hay que ser más contundente
El deterioro de la situación política por la que atraviesa Venezuela amenaza con convertirse en motivo de disputa entre Ciudadanos y el Gobierno (La Venezuela chavista camina hacia el abismo).
A puerta cerrada, la dirección de la formación naranja considera que el Ejecutivo español no ha sido todo lo contundente que debería haber sido ante el asalto al Parlamento y el ataque a varios diputados, y aboga por elevar el tono contra el régimen de Nicolás Maduro (Lilian Tintori logra ver a Leopoldo López en su calabozo del penal militar de Ramo Verde ).
Creen que la reacción que debería haber tenido el Ejecutivo es la ruptura de la relación con aquel país y la llamada a consultas al embajador español a la vista de que los comunicados, como el emitido por el ministerio de Asuntos Exteriores el jueves, no surten efecto en los bolivarianos (Otra más de los jetas de ‘Yoko Ono’ y ‘Echeminga’: «La oposición en Venezuela quema a personas vivas»).
«Dejémonos ya de escritos. Maduro cada vez que hacemos una declaración institucional tiembla… de risa».
Como explican al alimón Ana I. Sánchez y Víctor Ruiz de Almirón -en ‘ABC’ este 8 de julio de 2017, la formación naranja centra sus críticas en el perfil tibio del ministro de Exteriores, Alfonso Dastis.
«Echamos en falta liderazgo, hay que ser más contundente».
Además de llamar a consultas al embajador, creen que España debería liderar en la Unión Europea «una respuesta internacional contundente», que tendría que evitar medidas lesivas para la población como podría ser un embargo.
Pero sí otras medidas en línea con las que ha llevado a cabo Estados Unidos «contra algunos dirigentes del régimen».
La situación de Venezuela es un asunto importante para el electorado conservador que se disputan Ciudadanos y el PP. La formación naranja consiguió arrebatar al PP la bandera de principal defensor de la democracia en ese país al viajar su presidente, Albert Rivera, a Venezuela en plena campaña de las últimas elecciones generales.
Y no está dispuesta a perder esa imagen. De momento, Ciudadanos va a esperar a ver cómo evoluciona la situación y no llevará el asunto a la sesión de control al Gobierno que tendrá lugar el próximo miércoles en el Congreso.
