La oficina federal de estadística alemana ha revelado que el número de inmigrantes llegados a Alemania en 2015 fue el más alto desde que se fundó la República Federal de Alemania en 1949. Un total de 2.137.000 personas se trasladó a Alemania en ese periodo. Entre los nuevos inmigrantes no sólo hay refugiados: llegaron también ciudadanos europeos y extracomunitarios.
El aumento respecto a 2014 fue de 372.000 personas, lo que supone un crecimiento del 46 por ciento. Pero no sólo aumenta la acogida, también el éxodo. Casi un millón de personas (998.000) emigraron de Alemania en 2015, un 9 por ciento más que el año anterior. Sin embargo, del saldo obtenido de restar las entradas de las salidas resulta un excedente migratorio de 1,14 millones, correspondientes a las nuevas llegadas, una cifra histórica desde la finalización de la Segunda Guerra Mundial.
Más de la mayoría no tenía pasaporte alemán y las principales causas por las que llegaron fueron la huida de países en conflicto armado (1,1 millones de las personas que arribaron solicitaron asilo en Alemania) o la búsqueda de trabajo.
Del millón que salió de Alemania, no todos eran nativos. Algunos extranjeros volvieron a su lugar de origen, se mudaron o no fueron acogidos. De los autóctonos, sólo se marcharon 138.000 alemanes (10.000 menos que en 2014) y regresaron 121.000, una cifra casi idéntica.
Con estas cantidades y observando la reducción del desempleo que desde hace meses experimenta el país germano, se deduce que los alemanes no emigran al exterior en busca de empleo, al contrario de lo que ocurre en países del sur de Europa como España, Portugal, Grecia o Italia, sino por otros motivos como experiencia o intereses personales.
Un 45 por ciento de las llegadas fueron de ciudadanos de la Unión Europea, que disfrutan de libertad de movimiento gracias al espacio Schengen. El 13 por ciento procedía de países europeos de fuera de la Unión, seguido del 30 por ciento con orígenes asiáticos (fundamentalmente de Siria, Irak y Afganistán) y sólo el 5 por ciento provenía de África.
Los Länder que más inmigración recibieron fueron Renania del Norte-Westfalia, una de las regiones más desarrolladas del país germano, Baden-Württemberg y Baviera, donde su presidente Horst Seehofer, del partido socialcristiano CSU, se ha mostrado muy crítico con la política migratoria de Angela Merkel, acusándola de tener ?las puertas abiertas? ante la crisis de los refugiados.
La inmigración por motivos económicos es la principal causa de las llegadas, pues aumentan en las regiones alemanas con menos paro. Por sexos, los nuevos ciudadanos son 732.000 hombres y 407.000 mujeres. Esta proporción de 2 a 1 se repite de igual forma en todas las zonas.
En referencia a los países de la Unión Europea, la lista la encabezan Rumaníay Bulgaria, dos de los últimos en unirse al club de la Unión Europea, e Italia. Las cantidades muestran asimismo que todavía llegan más españoles a Alemania de los que se van porque vuelven a su origen o se trasladan a otros países, aunque las diferencias se van reduciendo. En total, el saldo de llegadas menos salidas entre ciudadanos españoles arroja una cifra positiva de 11.255 personas.
