La imagen del cuerpo sin vida del marido de Raquel Sánchez que publicó este miércoles su propia madre ha desatado no sólo un revuelo mediático sino también una cascada de críticas en las redes sociales. Santina, sin embargo, no se ha quedado callada y ha respondido a todos los que la tachan de morbosa e interesada –La terrible foto de Mario Biondo ahorcado… ¡que ha subido a Twitter su madre!-.
«La foto que he publicado de mi hijo en Facebook y Twitter ha despertado un gran eco mediático en España, que era nuestro único propósito dada la opinión pública española, ya que en Italia nadie se ha creído la pantomima del suicidio. Los españoles conocen la versión de la «viuda». Mi hijo ha sido injustamente mancillado y su imagen demonizada, yo estaré en primera línea para defenderlo. Esto es sólo el inicio». Así justificaba Santina Biondo su decisión de subir la imagen del cuerpo sin vida de su hijo, marido de la presentadora Raquel Sánchez Silva.
En las múltiples réplicas que ha llevado a cabo a las críticas recibidas a través de Twitter, Santina ha desvelado: «Mi hijo fue tratado como una mierda en España gracias a la feliz viuda». Y añade: «Quiero justicia para Mario, lo que le hicieron fue horrible y la teoría del accidente sólo fue una invención de Raquel». Algunos internautas han apuntado al interés económico de la familia en publicar dicha fotografía, pero la matriarca ha respondido contundente: «Estamos llenos de deudas para probar el asesinato de mi hijo».
Hace ya tres años que la familia de Mario Biondo lucha para demostrar que su hijo, según su versión, fue asesinado. El marido de Raquel Sánchez Silva fue encontrado muerto en su domicilio madrileño el 30 de mayo de 2013.
El informe llevado a cabo por la policía en España determinó que se había tratado de un suicidio, un resultado que la familia del cámara italiano no aceptó. El caso fue reabierto en Italia y tras revisar toda la investigación e interrogar de nuevo a todos los testigos, el forense asignado tuvo la misma conclusión: Mario se había suicidado. Expertos forenses y criminólogos contratados por la familia Biondo apoyan la teoría del asesinato y el caso sigue aún abierto en Palermo.
