El Otoño Invierno 2010 de Blanco nos sorprende con un tándem cuanto menos impecable. La madurez de Hilary Rhoda y la inocencia de Simon Nessman se combinan encontrando el punto justo de equilibrio entre la clase y la naturalidad.
Consagrada como uno de los rostros más cotizados, Hilary Rhoda posa por segunda vez para la cadena de tiendas que a través de ella presume de glamour y sofisticación. De forma rotunda y sumamente femenina, Hilary presenta looks de día y de noche para una mujer de ideas claras, con carácter y pisada firme.
En tan sólo diez fotografías Blanco nos muestra las tendencias más IN del nuevo otoño: abrigos clásicos, vestidos de corte lady, encajes seductores, look aviador, detalles de chic parisienne y un discreto estilo ecuestre británico.
La magia y los pocos artificios vienen dados por la solera y riqueza histórica de los restos neoclásicos del Palau Gomis, escondido en pleno corazón gótico barcelonés.
La línea masculina añade reminiscencias vintage a la contemporaneidad de sus looks con la recreación de la luz y el espacio de las antiguas producciones cinematográficas.
Con tan sólo 20 años y una mirada irresistible, Simon Nessman aporta una sobre carga de seducción a una colección en la que reinan el negro y el gris.
Abrigos de estética militar y de carácter «gentleman» compiten con la tendencia del estilo aviador en denim o piel vuelta. Las prendas de punto también se presentan en las dos versiones casi opuestas: sobrios lisos o con ilustraciones y estampados geométricos. Una estrella: la nadadora desaprestada y oversized.
