Como no se tomaron medidas para evitar accidentes en ese tramo Esther Rincón decidió ir ella misma a grabar desde el coche la curva del accidente
Esther Rincón perdió a su hijo de 22 años el pasado 18 de octubre en el km 28,8 de una curva de la autovía madrileña M-607.
Esta madre siempre sostuvo que la principal causa del accidente fatal fue el lamentable estado de la curva, un punto negro o «tramo de alta concentración de accidentes», tal y como los denomina la Dirección General de Tráfico (DGT).
Y lo quiso demostrar. Antes presentó una denuncia contra el Ministerio Fomento denunciando el punto donde perdió la vida su hijo.
Como no se tomaron medidas para evitar accidentes en ese tramo Esther decidió ir ella misma a grabar desde el coche la curva del accidente. La sorpresa es mayúscula cuando, sin esperarlo y ante sus propios ojos, se produce otro accidente en el mismo punto, que además ya tenía señales de un accidente anterior. Las imágenes son escalofriantes.