La Iglesia Católica sufrirá una "gran crisis interna" porque los millones de católicos del mundo no tienen una adecuada representación en los asuntos administrativos del Vaticano, dijo el sacerdote brasileño Leonardo Boff, promotor de la 'Teología de la Liberación', el lunes.

"La futura crisis en la Iglesia Católica se dará porque en el Vaticano no se encuentran todos los genuinos representantes de los católicos en el mundo", dijo Boff a periodistas, tras una visita al presidente paraguayo electo, Fernando Lugo, obispo católico suspendido por el Vaticano por dedicarse a la política.

"En la mayoría de los países latinoamericanos se practica el catolicismo y existe la mayor cantidad de practicantes de esa religión que en otros continentes", sostuvo Boff. "Estos católicos no están bien representados", agregó.

Cuando era cardenal, jefe de la Congregación de la Doctrina de la Fe, el ahora Papa Joseph Ratzinger sancionó a Boff por su prédica a favor de la Teología de la Liberación.

"El nulo crecimiento de la Iglesia Católica en el planeta" es otro factor que atizará su crisis interna, vaticinó el cura rebelde. Durante su entrevista con Lugo -que asumirá el 15 de agosto- Boff se puso a su disposición para asesorarlo.

Tras una extensa reunión con el futuro mandatario en el local de la Alianza Patriótica para el Cambio, el célebre ex sacerdote y teólogo, quien fue uno de los principales propulsores de la Teología de la Liberación, la cual fundara junto a Gustavo Gutiérrez Merino, en 1968, y que propugna el compromiso con los más pobres y con la opresión sufrida durante décadas en América Latina, manifestó que el testimonio de vida del ex obispo de San Pedro está plenamente identificado con la lucha a favor de los más carenciados.

“Yo como fundador de la Teología de la Liberación conozco a Lugo desde hace muchos años y como sacerdote se inscribía y se sigue inscribiendo dentro de la Teología. El eje fundamental y la marca registrada de esta Teología es la opción por los pobres contra la pobreza, a favor de la vida, la libertad, y esa es la línea principal del Presidente, difundir los focos de conflicto para ayudar a crear un rostro nuevo en el país”, expresó.

El teólogo brasileño manifestó que se reunió con el mandatario en su carácter de ambientalista buscando apoyo para proyectos ambientales regionales en compañía de representantes de Itaipú, y destacó la importancia de concienciar a la gente sobre la protección de los recursos hídricos. Afirmó que Paraguay y Brasil son “potencias del agua”, debido a la gran riqueza que poseen.

Indicó, además, que es justificado el reclamo que realizará el Paraguay sobre el tratado de la binacional y que existe voluntad política de ambas partes para la renegociación.

“Nadie debe prevalecer sobre el otro, todos tenemos que salir beneficiados y eso es objeto de una gran conversación política para que todos puedan tener ganancias, existe una enorme voluntad política de ambas partes”, señaló.

Boff denunció que la Cuenca del Plata, a la que calificó como "privilegiada" por su potencial hídrico, está amenazada, principalmente por la contaminación ocasionada por el vertido de pesticidas.

“Le presentamos un proyecto del Centro de Saberes y Cuidados Socioambientales “Cuenca del Plata”, para que existan personas que cuiden de los suelos, de las aguas, de las tierras, y el Presidente quiere apoyar este proyecto, que incluye a todos los países de la Cuenca del Plata y principalmente la parte paraguaya y brasileña de Itaipú; la región de la Cuenca está muy dañada, en varios sitios existe contaminación”, añadió.

Silenciado por el Vaticano

Leonardo Boff es un teólogo, filósofo y escritor nacido en Concórdia, estado de Santa Catarina, Brasil, conocido por su apoyo activo a los derechos de los pobres y marginados, y además al movimiento ecologista.

Es uno de los fundadores de la Teología de la Liberación, junto con Gustavo Gutiérrez Merino.

En 1985, la Congregación para la Doctrina de la Fe, dirigida por el cardenal Joseph Ratzinger (hoy papa Benedicto XVI) le silenció por un año por su libro La Iglesia, Carisma y Poder, que estaba en contra de la doctrina de la Iglesia Católica.