Este 24 de abril de 2014, Enric Sopena escribe en El Plural una columna titulada ‘Franco no fue sólo un dictador. Fue un asesino’ en la que arranca diciendo:
Y luego dirán que ellos no son franquistas. ¡Y claro que lo son! O mejor dicho, ellos son los protectores y los herederos del dictador.
Añade que:
Bueno, dicen los populares, es que nosotros no queremos denominar a Franco dictador. ¿Por qué? Pues porque el Caudillo no fue un dictador, sino simplemente un gobernante autoritario, según proclama el coro de la vieja guardia, acogida felizmente en Génova 13.
Y concluye que:
El Gobierno de Mariano Rajoy -cuyas vinculaciones con el franquismo son perfectamente conocidas- continúa en la misma senda no democrática del Gobierno de Aznar.