Este 20 de noviembre de 2014, escribe Luis María Ansón en El Imparcial una columna titulada ‘Ante el órdago de Mas hubiera sido mejor prevenir‘ en la que arranca diciendo:
No estoy seguro de que sea conveniente emprender acciones judiciales contra Arturo Mas. Tal vez no queda más remedio porque fiscales y jueces tienen la obligación de que la ley prevalezca. Pero es tarde y a posteriori puede producirse una reacción altamente inconveniente para los intereses de todos.
Añade que:
Ante la evidencia de la desobediencia de Arturo Mas debió intervenir tras la segunda decisión del TC, conforme a las exigencias del Estado de Derecho, para evitar la pantomima de la consulta. No lo hizo.
Y concluye que:
La pasividad, la lenidad, la inactividad han caracterizado la acción del Gobierno frente al desafío soberanista en Cataluña. Rajoy ha anunciado que viajará a Cataluña. Aunque es ya tarde, ojalá anuncie que abandona la política de debilidad e inacción para mostrar la fortaleza del Estado de Derecho ante los catalanes y ante el resto de los españoles.