Este 26 de noviembre de 2014, escribe Juan M. Blanco en Voz Pópuli una columna titulada ‘Nicolás retrata la corrupción’ en la que arranca diciendo:
El regreso mediático del joven Nicolás volvió a generar escándalo, morbo, suspense, adhesiones enfrentadas.
Añade que:
El viaje de Nicolás por las profundidades de la política española ofrece valiosas pinceladas, compone un bosquejo que permite recomponer parte del cuadro institucional. Y el resultado es un paisaje desolador, un panorama en el que tienen cabida todas las miserias, corruptelas y chapuzas posibles.
Y concluye que:
La discreción, la ambigüedad, la ausencia de prisas, en definitiva el cumplimiento de ciertas reglas no escritas, constituyen las señas de identidad en este contemporáneo patio de Monipodio que, dada la descomposición galopante, tiene los días contados.